"Este crecimiento, que se produjo entre el 1 y el 16 de diciembre, se debe al aumento del consumo de bacalao seco por parte de los portugueses y también al hecho de que la gente está comprando más en las tiendas", explicó.

"Como las empresas no van a celebrar las cenas habituales de Navidad, están ofreciendo cestas a sus trabajadores y están incluyendo el bacalao en cajas, que ya ha sido cortado", dijo el gerente de la empresa con sede en Coimbra y que fue fundada en 1987.

Por otro lado, dice el gerente, "la gente que busca el bacalao está comprando más tarde", lo que también explica el aumento registrado entre el 1 y el 16 de diciembre, en comparación con el mismo período de 2019.

"En el período de mayo y junio hubo una caída de las ventas por encima del 50 por ciento, de la que nunca pudimos recuperarnos", dijo Joselito Lucas, señalando que, en el total acumulado, Lugrade prevé una caída del 10 por ciento en la facturación de este año en relación con el 2019.

El sector de la exportación, que representa el 15% de la facturación, unos cuatro millones de euros, también cerrará el año con pérdidas del 10 por ciento, debido principalmente al "confinamiento en los países europeos".

"En el post confinamiento recuperamos algo, pero no lo suficiente", dijo Joselito Lucas, añadiendo que la mayor caída se registró en Francia, uno de los países más afectados por el covid-19.

La empresa exporta a varios países del mundo, desde Alemania hasta Canadá, pasando por Suiza.