La Comisión Nacional de Protección de Datos (CNPD) ha dado luz verde a Lisboa para instalar 216 cámaras de videovigilancia en 16 zonas del municipio. Sin embargo, ha declarado que el sistema "tiene que garantizar que no es posible editar o eliminar las mascarillas por parte de los usuarios del sistema o utilizar la capacidad de grabación de sonido", a fin de no comprometer la privacidad de los ciudadanos, en particular en sus casas o en la entrada de los edificios.