Según el comunicado, el objetivo es "asegurar un estrecho vínculo entre la calidad de la miel y su origen, proporcionando a los consumidores una información completa y adecuada".

En él se afirma que "se requiere una información uniforme, transparente, detallada y fiable sobre el origen de la miel para que los consumidores puedan elegir con conocimiento de causa".