En una pregunta presentada en la Asamblea de la República, la diputada Mariana Silva afirmó que la realización de este estudio para los antiguos trabajadores y sus familias es fundamental, porque la actividad minera del uranio "dejó un pesado pasivo, con riesgos tanto para el medio ambiente como para la salud pública que pueden perdurar durante un periodo de tiempo prolongado, dado el potencial radiactivo de este mineral".

ENU, que tenía su sede en Urgeiriça (Canas de Senhorim), en el municipio de Nelas, fue responsable durante décadas de la explotación de las minas de uranio en Portugal.

Mariana Silva recuerda que, en el ámbito de la OE 2020, a propuesta del Partido Ecologista Os Verdes (PEV), se encargó al Gobierno la realización de este estudio, teniendo en cuenta las graves enfermedades que afectan a los antiguos trabajadores de la ENU y a sus familias, como las neoplasias malignas.

"En octubre de 2020, al no haber desarrollo del estudio, la PEV pidió al Ministerio de Sanidad que aclarara la situación, sin embargo, la pregunta quedó sin respuesta por parte del Gobierno", lamenta.

Como el estudio epidemiológico no avanzó, la PEV volvió a presentar la propuesta en el marco de la OE 2021, que fue aprobada, añadió.

En este contexto, y a pesar de que durante el último año, el Ministerio de Salud se ha centrado en la respuesta al covid-19, "también es necesario dirigir los esfuerzos para responder a otras enfermedades, pero también actuar con anticipación para prevenir y detectar las enfermedades en una etapa previa, evitando daños irreversibles a la salud", dijo la diputada.

Mariana Silva quiere que el Ministerio de Sanidad aclare si "ya ha empezado a realizar este estudio epidemiológico" y, si es así, en qué fase se encuentra.

"Si aún no ha comenzado, ¿cuándo piensa el Gobierno iniciar este estudio epidemiológico?", se pregunta.

ENU era responsable de la explotación de las minas de uranio en Portugal desde 1977. La empresa entró en liquidación en 2001 y cerró definitivamente a finales de 2004.