En la sesión informativa posterior al Consejo de Ministros, Mariana Vieira da Silva fue preguntada por la evolución de las cifras de la pandemia en Portugal, que ese día registró 105 muertes relacionadas con el covid-19 y 1.944 nuevos casos de infección por el nuevo coronavirus, según la Dirección General de Salud (DGS).

A pesar de considerar que las cifras de infectados demuestran "el éxito de las medidas" vigentes, recordó que no es el único factor a tener en cuenta, ya que hay que analizar la capacidad de respuesta del SNS y el número de fallecimientos, variables que, a pesar de la tendencia a la baja, no permiten anticipar el fin del cierre en breve.

"Es una cifra muy alta, sigue siendo, a excepción del mes pasado, la cifra más alta que hemos tenido en todo este año y es una cifra que no es compatible con crear una expectativa de fin inminente del encierro", advirtió.

Así, el Gobierno mantiene la línea del primer ministro, António Costa, que precisamente hace una semana, también en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, defendió que aún no era el momento de que el país se centrara en el fin del encierro, sino en seguir cumpliendo las normas de encierro.

"Hay un trabajo técnico que se está haciendo, habrá un trabajo de articulación con las otras partes. Este es el momento de volver a apelar a todas las portuguesas y portugueses que tenemos que considerar que tenemos un número muy alto de internos en los hospitales y en las unidades de cuidados intensivos y aunque el camino que estamos tomando es alentador, todavía es demasiado pronto para pensar que está cerca del final", reiteró.