Los datos figuran en el informe "Portugal, Balance Social 2020 - Un retrato del país y los efectos de la pandemia", de la Facultad de Economía de la Universidade Nova de Lisboa, NOVA SBE.

El informe fue elaborado por la economista y profesora de la institución, Susana Peralta, en coautoría con Bruno P. Carvalho y Mariana Esteves.

En la primera parte, ofrece un retrato estadístico de la situación socioeconómica de las familias, centrándose en el período comprendido entre 2016 y 2019, pero centrándose principalmente en los años 2018 y 2019.

Las estadísticas se basan en los datos de la Encuesta sobre las Condiciones de Vida y Renta, realizada en Portugal anualmente por el Instituto Nacional de Estadística (INE)

El informe señala una tendencia a la baja en la tasa de riesgo de pobreza en el país en la última década, pero el porcentaje seguía siendo del 17,2% en 2019, por encima de la media de la Unión Europea, pero sería mucho mayor sin el apoyo del Estado.

"Las transferencias sociales son herramientas importantes para reducir la pobreza: en 2019, la proporción de personas en situación de pobreza, antes de las transferencias sociales, era del 43,4 por ciento", señala el informe.

En declaraciones a la agencia de noticias Lusa, Susana Peralta subrayó la relación entre la pobreza y los bajos salarios, que es la realidad en Portugal, así como la relación con el mercado laboral.

Según el informe, "los desempleados son el grupo con mayor tasa de pobreza en 2019 (42%)" y "trabajar a tiempo completo tampoco es garantía de salir de la pobreza: el 46% de la población pobre vive en hogares en los que los adultos trabajan más del 85% del tiempo, es decir, prácticamente a tiempo completo", añadiendo que además de los desempleados, la pobreza también es más frecuente entre las familias monoparentales y las personas con menor nivel de estudios".

"Portugal, al ser un país con salarios bajos y un nivel de precariedad del mercado laboral entre los más altos de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), hace que las personas tengan relaciones con el mercado laboral que no les protegen de la pobreza", dijo Susana Peralta.