El artículo explica que estas embarcaciones apagan sus transmisores de localización para evitar ser detectadas y dedicarse a la pesca ilegal, no declarada y no regulada, una práctica denominada INDNR.

Se calcula que la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada representa alrededor del 30% de toda la actividad pesquera mundial, lo que supone hasta 26 millones de toneladas de pescado capturado anualmente y cuesta a la economía mundial más de 23.000 millones de dólares al año. Esto tiene un impacto negativo en las poblaciones rurales costeras y contribuye a la disminución de las poblaciones de peces y a la destrucción del hábitat marino.

La misma fuente continúa diciendo que "ahora, el Ministerio de Pesca y Océanos de Canadá, en colaboración con el Departamento de Defensa Nacional y MDA (el mayor fabricante de tecnología espacial de Canadá, propietario de RADARSAT-2), ha puesto en marcha un nuevo programa que ya ha dado lugar a importantes multas a cinco buques extranjeros".

El programa, dotado de 7 millones de dólares, utiliza tecnología satelital para localizar y rastrear buques, cuyos dispositivos de transmisión de localización han sido apagados, en las Bahamas y Costa Rica.

La Red de Buenas Noticias aclara que el programa proporciona datos satelitales de última generación y análisis de la MDAa pequeñas naciones insulares y estados costeros de todo el mundo donde la pesca INDNR tiene un gran impacto en las economías locales y en la salud de las poblaciones de peces.