La información divulgada hoy por la Associação Natureza Portugal (ANP), en Portugal asociada al "Fondo Mundial para la Naturaleza" (WWF) internacional, aparece en el informe de la primera evaluación de tiburones y rayas de la organización, con el apoyo de la Fundación Océano Azul.

En cuanto a los resultados, la ANP / WWF pide la creación de un plan de acción nacional para la gestión y conservación de los tiburones y las rayas, que sitúa a Portugal en el liderazgo europeo de la protección de estas especies, dice en un comunicado. La organización de protección del medio ambiente dice que el informe "Tiburones y rayas: Guardianes del océano en crisis", es el primer estudio exhaustivo sobre el estado de las poblaciones de tiburones y rayas en Portugal, sobre su pesca, comercio y políticas. Según el análisis, "la sobrepesca y la protección inadecuada están amenazando a las 117 especies de tiburones, rayas y quimeras (peces cartilaginosos) existentes en el mar portugués, aunque estas especies clave son esenciales para la salud y el bienestar del océano".

Además de ser uno de los países que más especies captura, Portugal también ocupa el primer lugar de importaciones y exportaciones de pescado de tiburón y raya en Europa (8º y 6º lugar en el mundo, respectivamente), por lo que ANP / WWF pide a los consumidores que tengan un "papel activo" y eviten comer rayas o tiburones hasta que se demuestre que la pesca es sostenible: "En Portugal, los tiburones y las rayas se capturan de forma insostenible.Una cuarta parte de todos los desembarcos (en peso) de la flota portuguesa en los últimos 30 años, corresponden a especies que están actualmente amenazadas, tres cuartas partes de las especies pescadas tienen sus poblaciones en declive y siete especies históricamente pescadas están ahora en peligro crítico, a un paso de la extinción", subraya la asociación en el comunicado.

Ângela Morgado, directora ejecutiva de ANP / WWF, afirma, citada en el documento, que la forma de pescar en Portugal está amenazando a los tiburones y las rayas, y sostiene que para evitar un océano sin tiburones y rayas "el Gobierno portugués debe asumir el liderazgo europeo en este tema, avanzando hacia una pesca selectiva y de bajo impacto, y convirtiéndose en el primer Estado miembro en crear un Plan de Acción Nacional para estas especies", y hasta que no exista dicho plan, añade, la reducción del consumo es la única protección posible, razón que llevó a la organización a proponer un compromiso a los ciudadanos para decir "no" al consumo de tiburones y rayas.