De media, las familias portuguesas pagaron 23,7 euros por 100 kWh de electricidad en 2020.

Al igual que en 2019, Portugal tuvo la cuarta electricidad más cara de la Unión Europea para el consumo doméstico en el segundo semestre de 2020, en términos de poder adquisitivo de los hogares (por MWh), después de la República Checa, España y Alemania. Los datos proceden del último boletín de Eurostat, publicado este lunes.