"Los países deben tener en cuenta la cobertura de las vacunas y la tasa de incidencia local [del virus que causa el covid-19] antes de decidir la retirada de estas medidas", dijo Michael Ryan, director del programa de emergencias de la OMS, en una conferencia de prensa.

Estados Unidos anunció el jueves que pondrá fin al uso obligatorio de máscaras faciales para las personas vacunadas, incluso en algunos entornos cerrados, debido a la evolución favorable de la lucha contra la pandemia de covid-19, un cambio que fue celebrado por el presidente Joe Biden.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) revisaron sus directrices para las personas totalmente vacunadas, permitiéndoles dejar de usar máscaras al aire libre en multitudes y en la mayoría de los ambientes cerrados.

Sin embargo, se sigue exigiendo el uso de mascarillas en entornos cerrados muy concurridos, como autobuses, aviones, hospitales o prisiones.

En la rueda de prensa de hoy, celebrada digitalmente desde la sede de la OMS en Ginebra, Michael Ryan ha recordado que las vacunas contra el covid-19 protegen contra la enfermedad más grave, pero todavía no hay "grandes pruebas de la capacidad de una persona vacunada para infectar a otras personas".

En vista de ello, los países que pretendan eliminar la obligación de llevar mascarilla, sólo deberán hacerlo "teniendo en cuenta la intensidad de la transmisión en esta zona y, al mismo tiempo, el nivel de cobertura de la vacunación", señaló el responsable de la OMS para los programas de emergencia, sin referirse específicamente a Estados Unidos.

Para la epidemióloga Maria Van Kerkhove, responsable técnica de la respuesta de la OMS al covid-19, la decisión de las autoridades nacionales sobre la exención del uso de una máscara debe evaluarse siempre "en el contexto" de cada país, pero también en el nivel de vacunación alcanzado.

"Todavía no estamos fuera de peligro. Todavía hay muchas incertidumbres debido a las variantes y debemos hacer todo lo posible para evitar más infecciones y salvar vidas", advirtió el epidemiólogo.