España y Portugal "son países que relajaron las normas en las fronteras, en particular con el Reino Unido, mucho antes que nosotros", dijo Attal, en una entrevista con France Inter, añadiendo que el gobierno francés fue censurado por ello. Según Attal, "Francia tiene un marco de restricciones en sus fronteras que es uno de los más estrictos de Europa".

París exige una cuarentena, en algunos casos bajo control de las autoridades, a los viajeros procedentes de muchos países de fuera de la Unión Europea. Los que viajan desde el Reino Unido deben presentar un certificado de vacunación y una prueba negativa (PCR o antígenos), y a los no vacunados se les exige un "motivo imperioso" para viajar y una prueba negativa, y a su llegada a Francia otra prueba y una cuarentena de siete días. Attal admitió que una nueva ola epidémica en Francia a finales de julio es "una posibilidad", dada la expansión de la variante Delta, más contagiosa y cuya presencia se duplica cada semana, responsable ya del 30% de los nuevos contagios.

Esa hipótesis, dijo, es especialmente creíble si se observa lo que está ocurriendo en otros países europeos, como el Reino Unido, Portugal, Rusia o España. En Francia, la incidencia del Covid-19 ha descendido hace cinco días y ha ido en aumento, según la agencia de noticias española Efe.En España, la incidencia de la enfermedad el 18 de junio era de 96 casos por cada 100.000 habitantes y el 2 de julio la incidencia acumulada en 14 días superaba ya los 150 casos por cada 100.000 habitantes. En cuanto a Portugal, el 18 de junio la incidencia acumulada en 14 días era de entre 60 y 119,9 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que el 4 de julio era de 189,4 casos por cada 100.000 personas.