El estudio, presentado en la Tribuna de Honra del Centro Desportivo Nacional do Jamor, realizado por la consultora PwC, pretende reflejar el impacto total de la pandemia del Covid-19 en el deporte nacional. Según el análisis realizado y solicitado por el Comité Olímpico de Portugal, el Comité Paralímpico de Portugal y la Confederación Deportiva Portuguesa, la pandemia habrá implicado, el año pasado, una disminución de alrededor de 595 millones de euros en términos de valor añadido bruto y una pérdida de alrededor de 16.000 puestos de trabajo, en comparación con los datos de 2019.

En una presentación a la que asistieron varias entidades y representantes de diferentes federaciones, José Manuel Lourenço, presidente del Comité Paralímpico de Portugal, argumentó que este estudio "simboliza la discriminación focalizada que sufrió el deporte".

"Hubo una falta de apoyo por parte del Gobierno, pero no se puede decir lo mismo de las autoridades locales, y hay que tener en cuenta que en cuanto a los contratos de los programas, se cumplieron estrictamente. El problema afectó a los que no tienen voz, los clubes más pequeños y el movimiento asociativo, y no a los de altos ingresos. Los costes y el impacto no fueron en la alta competición, aunque tendrá un impacto en los próximos años", advirtió José Manuel Lourenço.

Al igual que José Manuel Lourenço, el presidente del Comité Olímpico de Portugal cree que los "graves impactos se sintieron en el deporte de base, en las organizaciones con menos capacidad económica y menos capacidad técnica instalada. Esas fueron las que más sufrieron. Y son éstas, en su mayoría, las que necesitan del apoyo público para sobrevivir, recuperarse y desarrollar sus actividades", subrayó.

Carlos Paula Cardoso, presidente de la Confederación Deportiva Portuguesa, recuerda que el deporte "aún no se ha recuperado financieramente del periodo 2011/2013 y ya está sometido a recortes, además de haber sufrido un aumento de los costes de la práctica deportiva debido a las exigencias de las pruebas."