"Después de evaluar esta solución [el trasvase de arena], no hay duda de que el bypass es la forma más adecuada y, por lo tanto, vamos a hacerlo", dijo João Pedro Matos Fernandes.

El estudio presentado el 12 de agosto por la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente (APA), evalúa cuatro soluciones diferentes de transposición de arena y concluye, para Figueira da Foz, que aunque todas las soluciones son "técnica y económicamente viables", el sistema fijo es el que "presenta los mejores resultados a largo plazo (30 años)".

El estudio sitúa la inversión inicial con la construcción de la variante en unos 18 millones de euros y un coste total, a 30 años, que incluye la explotación y el mantenimiento, de unos 59 millones de euros.

"Evidentemente, lo que tenemos, por ahora, es un estudio de viabilidad económica y medioambiental. Tenemos que transformarlo en un proyecto, para que, rápidamente, a tiempo para el próximo Marco Comunitario de Apoyo, se pueda financiar", subrayó la ministra.

En su intervención durante la sesión, Matos Fernandes dijo que en el próximo Marco Comunitario de Apoyo [Portugal2030] "hay claramente fondos para pagar esta intervención" y que "aunque sea grande, corresponde a cerca del 8 por ciento de los fondos disponibles" de los fondos comunitarios para el litoral portugués.

"Es obvio que esta obra se va a hacer. Y, por eso, con este estudio hecho, dejemos que el proyecto avance y aclare las dudas que tendremos", observó el responsable gubernamental.

El sistema fijo de transposición mecánica de sedimentos, conocido como bypass, cuya instalación en la playa, junto al norte del puerto de Figueira da Foz, defiende el movimiento cívico SOS Cabedelo desde hace una década, será el primero en Portugal e idéntico a otro instalado en la Costa de Oro australiana.

"Definitivamente, las playas portuguesas son mejores que otras porque son playas de arena y eso es lo que queremos tener en la playa. Y al sur de Figueira da Foz tenemos poca arena", argumentó Matos Fernandes, reafirmando su oposición a los arenales "falsos".

"Las intervenciones que se estaban haciendo, en el sentido de falsear la costa, acabaron trayendo más problemas que beneficios y, por eso, es fundamental poner arena en la playa", defendió el ministro.

"Si lo hacemos de forma continuada y con estructuras fijas, podemos conseguir el mismo objetivo de tener arena en las playas, sin tener que andar, cada año, dragando y reponiendo arena. Así tenemos una solución definitiva que podemos ajustar a nuestras necesidades.Esta idea de un millón de metros cúbicos (m3) de arena por año fue presentada aquí, vamos a ver, tal vez haya años en que se necesite más, otros menos, pero también tenemos esta flexibilidad, después, en la exploración del propio mecanismo que vamos a crear aquí", destacó Matos Fernandes.