David Sousa, que habló con Lusa sobre las directrices de la Dirección General de Sanidad (DGS ) publicadas el martes, que serán más flexibles en el próximo curso escolar, dijo que las medidas no suponen una gran novedad y que no se cambiará el papel de los colegios: "No era nada nuevo ni por las declaraciones del secretario de Estado de Sanidad de la semana pasada ni por las de los medios de comunicación de esta semana. Ya se preveía que no habría grandes cambios. La situación epidemiológica es la que es y ya se ha advertido que el mantenimiento de las normas que estaban vigentes hasta ahora, es decir, las relacionadas con la protección como el uso de mascarilla, el distanciamiento, el lavado de manos, la aireación de los espacios habría que mantenerlas desde nuestro punto de vista", dijo.

Según el vicepresidente de ANDAEP, los cambios son pequeños, pero pueden tener alguna contribución para que cuando haya un caso positivo de covid-19, haya menos consecuencias para un mayor número de alumnos: "Por lo que leemos no hay ningún cambio importante y son medidas que dependen de las decisiones de las autoridades sanitarias". En cuanto al papel de los colegios, todo se mantiene, es decir, no hay que hacer ningún cambio. Todo lo que eran las normas que ya estaban en el plan se mantienen en estas directrices", dijo.

David Sousa subrayó a Lusa que se mantiene la voluntad de los directores de las escuelas: que durante el próximo curso escolar la enseñanza sea 100 por ciento presencial: "Nuestra voluntad se mantiene: que durante este año no haya escuelas que se cierren, que la enseñanza sea 100 por ciento presencial, ese es nuestro principal objetivo. Todo lo que se haga en este sentido, dadas las circunstancias de la evolución de la pandemia, es importante para nosotros. Lo peor sería tener que volver a confinar, cerrar una escuela, confinar muchas clases, este es el gran problema que queremos evitar a toda costa", dijo.

Como parte de las medidas para que las escuelas combatan la pandemia de Covid-19, en el próximo curso escolar ya no se obligará a clases enteras a permanecer en casa durante dos semanas cuando se detecte un caso positivo, como ocurría a partir de abril, cuando la DGS revisó el protocolo de actuación para estas situaciones. Ahora se han revisado las directrices, dos semanas antes del inicio de las clases, y serán más flexibles, ya que los contactos considerados de bajo riesgo o que den negativo deberán volver a la escuela.

Según la referencia publicada en la web de la DGS, en una situación de "cluster" o brote, las autoridades sanitarias pueden determinar el cierre de una o varias clases o áreas del colegio, o de todo el centro educativo. Sin embargo, añade el documento, "los contactos de bajo riesgo y/o los contactos de los contactos cuyas pruebas sean negativas deben interrumpir el aislamiento profiláctico, reanudando la actividad docente respectiva".

Esta es la principal novedad para el próximo curso escolar, que se inicia entre el 14 y el 17 de septiembre, con especial atención a la recuperación de los aprendizajes afectados durante la pandemia del covid-19, una labor para la que la DGS dice ser también sensible. Las nuevas directrices mantienen la gran mayoría de las normas de seguridad sanitaria, incluyendo el uso obligatorio de mascarilla a partir de los 10 años y "muy recomendable" para los más pequeños, desde el 1er ciclo.

Al igual que el curso pasado, cuando los colegios reabrieron sus puertas en abril, también se llevarán a cabo revisiones antes del inicio de las clases, que abarcarán a los profesores y al personal de todos los niveles educativos y a los alumnos a partir del 3er ciclo. Estos cribados se llevarán a cabo en tres fases: al final de la primera semana de clases, los profesionales de la escuela se someterán a las pruebas, en un ejercicio que comienza el 6 de septiembre y termina el 17. Le seguirán los alumnos de secundaria durante las dos semanas siguientes, entre el 20 de septiembre y el 1 de octubre, y finalmente los alumnos de 3er ciclo, entre el 4 y el 15 de octubre.

<head24> Normas y pruebas de Covid para el ejercicio escolar presencial

<intro9> El vicepresidente de la Asociación Nacional de Directores de Agrupaciones y Colegios Públicos (ANDAEP) ha destacado hoy la importancia de mantener las normas de protección individual y reforzar las pruebas para que el próximo curso escolar sea 100% presencial.

<body9> David Sousa, que hablaba a Lusa sobre las directrices de la Dirección General de Sanidad (DGS) publicadas el martes, que serán más flexibles en el próximo curso escolar, dijo que las medidas no aportan grandes novedades y que no se modificará el papel de los colegios: " No era nada nuevo ni por las declaraciones del secretario de Estado de Sanidad de la semana pasada ni por las de los medios de comunicación de esta semana. Ya se preveía que no habría grandes cambios. La situación epidemiológica es la que es y ya se ha advertido que el mantenimiento de las normas que estaban en vigor hasta ahora, es decir, las relacionadas con la protección como el uso de mascarilla, el distanciamiento, el lavado de manos, la aireación de los espacios habría que mantenerlas desde nuestro punto de vista", dijo.

Según el vicepresidente de ANDAEP, los cambios son pequeños, pero pueden tener alguna contribución para que cuando haya un caso positivo de covid-19, haya menos consecuencias para un mayor número de alumnos. "Por lo que leemos no hay ningún cambio importante y son medidas que dependen de las decisiones de las autoridades sanitarias. En cuanto al papel de las escuelas, todo se mantiene, es decir, no tenemos ningún cambio que hacer. Todo lo que eran las normas que ya estaban en el plan se mantienen en estas directrices", dijo.

David Sousa subrayó a Lusa que se mantiene la voluntad de los directores de las escuelas: que durante el próximo curso escolar la enseñanza sea 100 por ciento presencial: " Nuestra voluntad se mantiene: que durante este año no haya escuelas que se cierren, que la enseñanza sea 100 por ciento presencial, ese es nuestro principal objetivo. Todo lo que se haga en este sentido, dadas las circunstancias de la evolución de la pandemia, es importante para nosotros, lo peor sería tener que volver a confinar, cerrar una escuela, confinar muchas clases, este es el gran problema que queremos evitar a toda costa", dijo.

Como parte de las medidas para que los colegios combatan la pandemia del covid-19, en el próximo curso escolar ya no se obligará a clases enteras a permanecer en casa durante dos semanas cuando se detecte un caso positivo, como ocurría a partir de abril, cuando la DGS revisó el protocolo de actuación para estas situaciones. Ahora se han revisado las pautas, dos semanas antes del inicio de las clases, y serán más flexibles, ya que los contactos considerados de bajo riesgo o que den negativo deberán volver a la escuela.

Según la referencia publicada en la página web de la DGS, en una situación de "cluster" o brote, las autoridades sanitarias pueden determinar el cierre de una o varias clases o áreas del colegio, o de todo el centro educativo. Sin embargo, añade el documento, "los contactos de bajo riesgo y/o los contactos de los contactos cuyas pruebas sean negativas deben interrumpir el aislamiento profiláctico, reanudando la actividad docente respectiva".

Esta es la principal novedad para el próximo curso escolar, que se inicia entre el 14 y el 17 de septiembre, con especial atención a la recuperación de los aprendizajes afectados durante la pandemia del covid-19, una labor para la que la DGS dice ser también sensible. Las nuevas directrices mantienen la gran mayoría de las normas de seguridad sanitaria, incluida la obligatoriedad del uso de mascarilla a partir de los 10 años y "muy recomendable" para los más pequeños, desde el 1er ciclo.

Al igual que el curso pasado, cuando los colegios reabrieron sus puertas en abril, también se llevarán a cabo cribados antes del inicio de las clases, que abarcarán a los profesores y personal de todos los niveles educativos y a los alumnos a partir del 3er ciclo. Estos cribados se llevarán a cabo en tres fases: al final de la primera semana de clases, los profesionales de los colegios se someterán a las pruebas, en un ejercicio que comienza el 6 de septiembre y finaliza el 17. Le seguirán los alumnos de secundaria durante las dos semanas siguientes, entre el 20 de septiembre y el 1 de octubre, y finalmente los alumnos de 3er ciclo, entre el 4 y el 15 de octubre.