Aunque está claro que se está apostando mucho por los coches eléctricos de batería, la energía eléctrica de hidrógeno es vista por muchos como una solución real a muchos problemas de movilidad.

Igual de limpio que un coche eléctrico normal, pero algo más rápido de "llenar", el hidrógeno podría ser el combustible ideal para el futuro.

Y aunque actualmente sólo hay dos coches impulsados por hidrógeno a la venta en el Reino Unido -el Toyota Mirai y el Nexo de Hyundai-, el combustible está ganando rápidamente adeptos, y Hyundai ha prometido recientemente un mayor apoyo al combustible, especialmente en el futuro de los vehículos comerciales.

Pero, ¿cómo funciona? Veamos qué más hay que saber sobre la energía del hidrógeno...


¿Cómo funciona realmente?

Aunque puede parecer que la energía del hidrógeno y los coches eléctricos de batería convencionales son como la tiza y el queso, la realidad es que los dos sistemas de propulsión son bastante similares. Ambos utilizan un motor eléctrico para la propulsión e incorporan una batería, pero en los coches de hidrógeno, ésta es mucho más pequeña.

¿La razón? Pues que está conectada a una pila de combustible de hidrógeno y a un tanque de almacenamiento que proporciona la energía. El hidrógeno almacenado en el depósito se introduce en la pila de combustible, donde se mezcla con el oxígeno y así se mantiene la batería. ¿Las emisiones? Sólo agua.


¿Hay que esperar mucho tiempo para "llenar" un coche eléctrico?

Esa es una de las verdaderas ventajas del hidrógeno. Mientras que un coche eléctrico tarda cierto tiempo en cargarse -incluso los cargadores más rápidos tardan al menos 25-30 minutos en pasar del 5 al 80%-, un repostaje completo de hidrógeno tarda más o menos lo mismo que un coche de gasolina o diésel.


¿Y cuántos kilómetros se consiguen con un repostaje?

Los vehículos de hidrógeno tienen una buena autonomía con el depósito lleno. El nuevo Toyota Mirai de segunda generación, por ejemplo, tiene una autonomía declarada de entre 300 y 400 millas.

Sin embargo, un equipo de Francia ha establecido recientemente un nuevo récord al recorrer 623 millas con un solo depósito de hidrógeno. Con un Toyota Mirai, se ha batido el récord anterior por 72 millas.


¿Cuesta mucho más repostar hidrógeno que gasolina o gasóleo?

La verdad es que no. Llenar el depósito del Toyota Mirai cuesta unos 60 euros, más o menos lo mismo que un coche de gasolina de tamaño medio.


¿Existe algún problema de seguridad con la energía del hidrógeno?

Muy pocos. De hecho, durante las recientes pruebas de seguridad de Euro NCAP, los ingenieros prestaron especial atención a cómo se comportaba el Toyota Mirai de hidrógeno en caso de colisión. Sin embargo, comprobaron que la cadena cinemática de hidrógeno no tenía ningún efecto negativo en la seguridad general del coche y le otorgaron una calificación de cinco estrellas.


¿Hay muchas estaciones de servicio de hidrógeno en el Reino Unido?

En la actualidad, no. En la actualidad, sólo hay 11 estaciones de servicio de hidrógeno en el Reino Unido, la mayoría de ellas situadas en los alrededores de Londres. La única ubicación en el norte de Inglaterra está en Sheffield, pero entre ésta y las estaciones situadas en el sur hay una gran zona en blanco. Sin embargo, está previsto que haya más estaciones para paliar este problema.


¿Se pondrán a la venta pronto más modelos de hidrógeno?

Es cierto que, por el momento, la oferta de coches de hidrógeno es limitada. Con sólo el Hyundai Nexo y el Toyota Mirai a la venta, podría pensarse que los fabricantes no confían en el combustible. Sin embargo, no es el caso, ya que pronto llegarán más modelos al mercado.

BMW está desarrollando una versión de su X5 con motor de hidrógeno, denominada iX5, mientras que el recién llegado Genesis también ha declarado que sacará un coche de hidrógeno al mercado.