José Gouveia habló con Lusa sobre los diversos incidentes que han marcado las noches de las últimas semanas, como el caso de un guardia de seguridad que golpeó a un cliente dándole puñetazos y patadas en una discoteca de Albufeira y la muerte de un joven de 23 años en Oporto que fue golpeado en la vía pública junto a un establecimiento nocturno.

"Todavía no hemos oído hablar al Ministerio de Administración Interior [MAI] sobre estos hechos. No hemos oído a nadie del Estado venir a hablar de estas situaciones", dijo el presidente de la Asociación Nacional de Discotecas (ADN).

José Gouveia también dijo a Lusa que ADN quiere transmitir a la gente el mensaje de que estas graves situaciones no son típicas.

"El principal mensaje que queremos transmitir es que estas situaciones no definen la noche. La asociación ha estado debatiendo este problema y lamentablemente hemos sido un símbolo de la violencia que se vive en todo el país", dijo.

Según el presidente de ADN, situaciones como las agresiones en el Algarve, en las que se vio implicado un vigilante que ni siquiera formaba parte del equipo de seguridad de la discoteca donde se produjeron los ataques, no definen al sector.

"Esta situación no refleja ni define lo que es, por ejemplo, la seguridad en Portugal. Del mismo modo que la actitud y la postura que tuvieron las fuerzas de seguridad en ese caso [en el Algarve], la GNR, tampoco puede considerarse como una definición de lo que es una institución como la GNR. Esa es una situación única que no se pretende replicar en otras situaciones", subrayó.

José Gouveia recordó que ADN mantuvo, durante los 19 meses en los que los clubes estuvieron cerrados, reuniones con la Secretaría de Estado de Comercio y con el Ayuntamiento de Lisboa, en las que advirtieron de la importancia de regular mejor las cuestiones relativas a la vida nocturna.

"Sabemos que en los momentos de crisis financiera y económica que estamos viviendo, la violencia acaba aumentando y también cuando hay una sensación de impunidad como la que vemos en las imágenes que se proyectan en la televisión o en las personas que son sorprendidas en robos y que salen el mismo día" , dijo.

A su entender, esto hace que se produzca el aumento de la delincuencia.

"Se habla tanto de la seguridad, de la seguridad en la noche, en las casas, pero no se habla de la seguridad en la calle, que es responsabilidad del Estado, de la tutela del MAI y de las fuerzas de seguridad que operan en esa zona. En algunos GNR en otros, la PSP", destacó, abogando por un aumento de la policía.

En opinión de José Gouveia, la presencia de las fuerzas de seguridad es un elemento disuasorio, por ejemplo en casos de robo o violencia.

"Siempre doy este ejemplo. De Docas a Cais do Sodré [Lisboa] hay cinco minutos en coche. Si tenemos un coche moviéndose cada cinco minutos en esa zona de ocio nocturno, este coche patrulla es un elemento disuasorio", dijo.

José Gouveia recuerda que las discotecas son centros de diversión que implican excesos con el alcohol y por eso el Estado tiene que tener un mayor control.

"Estamos obligados a tener una serie de normas en los establecimientos, todo ello por el tipo de negocio que tenemos y luego el cliente sale y no hay policía, un sistema de videovigilancia. Aquí acaba habiendo un desequilibrio", subrayó.

José Gouveia destacó que el negocio nocturno "es frágil, lo pasó mal y no necesita esto".

"Lo que pedimos es que haya un diálogo con el Estado. Tenemos conocimiento de la operación, de lo que pasa en la calle, por lo que queremos ser escuchados, explicar cómo se resuelven estas situaciones. También queremos pasar una palabra de concientización a las empresas, a los negocios que operan en la noche, para que tengan cuidado para que estas situaciones no ocurran, más cuidado con sus clientes, con el tipo de personas que contratan y las empresas con las que trabajan", concluyó.