La pareja, de 82 y 93 años, llegó al aeropuerto de Faro, el 2 de octubre de este año, a las 8:15 horas, con la asistencia especial necesaria para embarcar en el avión de Ryanair a las 10:15 horas, con destino a East Midlands, Reino Unido. Sin embargo, la espera fue larga y cuando llegó el momento de embarcar finalmente el ascensor no llegó a tiempo.

"A las 9:45 empecé a inquietarme. Pregunté a la chica de My Way cuándo llegaría el ascensor. Me dijo que no me preocupara porque llegaría pronto. Me dijo que el capitán sabía que íbamos a llegar. A eso de las 20, nos subieron al ascensor y depositaron algunos pasajeros extra en Birmingham. Entonces la chica dijo: "Lo siento, el capitán no quiere volver". Entonces el avión despegó dejándonos tirados", declaró la pareja a The Portugal News.

La pareja lamenta el trato recibido, ya que tuvieron que esperar 12 horas hasta el siguiente avión en condiciones incómodas. Durante este periodo, la pareja con necesidades especiales consiguió hablar con el mostrador de Ryanair y, tras explicarles toda la situación, pudieron regresar a East Midland en el vuelo de las 21:00 horas. Sin embargo, la pareja sigue muy decepcionada y ha exigido una compensación que nunca ha llegado.

A lo largo de estas 12 horas, la situación se hizo cada vez más dolorosa para la pareja, que trató de pedir ayuda: "Le dije a la chica de Ryanair: mi mujer de 93 años no puede estar sentada en estas incómodas sillas de metal durante 12 horas, ¿podríamos ir a un hotel para el periodo intermedio? "Sí", me dijo, "pero no puedo reservarlo". Entonces fueron al hotel más cercano por su cuenta, pero el hotel estaba lleno y tuvieron que volver.

Sólo 22 horas después pudieron regresar a Inglaterra: "Ryanair había tenido la amabilidad de organizar un taxi para llevarnos desde EMA a casa, en Alfreton, pero no llegamos a casa hasta la 1 de la madrugada del día siguiente. Esto significó un calvario de 22 horas para mi esposa de 93 años", dijo el pasajero en una queja que remitió a Ryanair.

Durante más de un mes, The Portugal News ha intentado hablar con todas las entidades implicadas en este caso. Principalmente, el gabinete de prensa de Ryanair pasó la culpa a My Way, ya que es la entidad responsable de prestar asistencia especial en el aeropuerto de Faro. Sin embargo, My Way también se negó a dar aclaraciones diciendo que corresponde a los aeropuertos de ANA responder a todas las preguntas al respecto. Además, The Portugal News intentó ponerse en contacto con los aeropuertos de ANA; sin embargo, al cierre de esta edición los aeropuertos de ANA no habían dado respuesta.

A pesar de que corresponde al aeropuerto prestar asistencia a las personas con movilidad reducida, la pareja sigue culpando a la aerolínea de lo ocurrido: "El capitán debía saber que debíamos estar a bordo, pero decidió cruelmente dejarnos en la estacada", concluyen.


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Paula Martins is a fully qualified journalist, who finds writing a means of self-expression. She studied Journalism and Communication at University of Coimbra and recently Law in the Algarve. Press card: 8252

Paula Martins