"Respetamos el derecho a la protesta y entendemos la posición de los manifestantes, que creen que son necesarias más acciones en el movimiento de descarbonización", dijo una fuente de la administración de Galp.

La misma fuente oficial añadió que la protesta de Climáximo, que reunió a un centenar de manifestantes a lo largo de los distintos accesos de la unidad, en una acción no violenta de desobediencia civil y un bloqueo, "no afectó a la actividad de la refinería de Sines".

"Galp está preparando el camino para la descarbonización de su actividad y para posicionar a la empresa y al país en la vanguardia de la transición energética", añadió.

Según la empresa, la refinería de Sines "formará parte de esta transformación, transitando con el tiempo hacia un Parque Energético Verde, con nuevas soluciones sostenibles, como el hidrógeno verde y los biocombustibles".