El Santuario de Santa Luzia es el lugar ideal para quienes aprecian la arquitectura románico-bizantina. El Santuario, terminado en 1943, es uno de los lugares más visitados de la ciudad. La entrada es gratuita y para llegar al Monte de Santa Luzia se puede ir en coche; sin embargo, la ciudad pone a disposición de los visitantes un transporte funicular que facilita la empinada subida al punto más alto de la ciudad.

En la Praça da República de Viana do Castelo se puede encontrar artesanía regional, bares y restaurantes. La arquitectura de los edificios que la rodean recuerda a la de un castillo, mientras que en este lugar se encuentran algunos edificios históricos como el Antiguo Ayuntamiento o la Fuente Quinhentista.

Cascadas

A 30 minutos en coche del centro de Viana hay pequeños paraísos como cascadas y paisajes que sólo existen en la región. En la Sierra de Arga se encuentra la Cascada del Pincho, bañada por el río Âncora. El lugar es muy popular para los que les gusta caminar por los senderos de la montaña. Lo mismo ocurre en Poço Negro, también en Serra d'Arga. El lugar sólo está iluminado por el sol entre las 11:00 y las 14:30 horas, pero para llegar a él los visitantes deben caminar una distancia de dos kilómetros, ya que no hay acceso en coche. Al final de la caminata, los visitantes pueden darse un baño en la piscina natural que encontrarán en un lugar llamado Poço Negro.

Pilgamage

A pesar de toda la belleza natural e histórica de la ciudad, es en agosto cuando se pueden ver los tradicionales ex libris de la ciudad. La Romería de Nossa Senhora da Agonia. La fiesta que siempre tiene lugar en agosto, recibió en 2013 la Declaración de Interés Turístico. La Romería celebra la devoción religiosa de los habitantes de Viana do Castelo. Esta fiesta se remonta a 1772 y aún hoy consigue ser el punto culminante de los habitantes de Viana do Castelo, que la disfrutan anualmente durante la semana del 20 de agosto, fiesta municipal.

El punto culminante de la Romería es el Desfile da Mordomia, en el que más de 500 mujeres desfilan vestidas con el traje tradicional de Viana do Castelo, llevando varias piezas de oro. Durante el desfile, las mujeres difunden lo que los habitantes de Viana do Castelo llaman "chieira", que puede traducirse por vanidad, a pesar de significar algo mucho más concreto, que sólo los que lo viven pueden explicar. Isabel Gonçalves es una joven de Viana do Castelo que ya se ha vestido con el traje tradicional y ha desfilado por las calles de Viana do Castelo. El desfile es el punto álgido de la peregrinación para las mujeres de Viana do Castelo", explica a The Portugal News.

El traje tradicional de Viana do Castelo consiste en un pañuelo, una camisa, un chaleco, una falda, un delantal y una "algibeira" (bolsillo). Las mujeres también llevan calcetines hasta la rodilla, confeccionados en encaje de hilo de algodón. Por último, las mujeres llevan las "chinelas" (zapatillas). Las chinelas tienen suela de madera y parte superior de ternera natural o sintética. El color del traje varía según la región de la mujer que lo lleva.

Según Isabel, el gusto por llevar el traje tradicional pasa de generación en generación, al igual que el "traje de gala" que puede estar en la familia de la mujer desde hace varios años. Antes, sólo las mujeres de Viana do Castelo participaban en el Desfile da Mordomia, hoy Isabel dice que personas de todo el país, e incluso mujeres extranjeras, quieren disfrutar de la experiencia de participar en la romería y llevar el traje tradicional. Según Isabel, "el desfile es un momento de unión, con mucho entusiasmo y, sobre todo, mucha alegría".

Quien lleva el traje sabe que tendrá que seguir algunas normas, como: no llevar las uñas pintadas ni maquillarse. Antes de desfilar, algunos se aseguran de que las mujeres cumplen todas las normas que hay que seguir para desfilar por las calles más emblemáticas de la ciudad, al son de "tambores, palmas y muchas voces".

Isabel revela que el hecho de que el desfile sea visto por miles de personas hace que el "momento sea aún más memorable para los que lo ven, pero sobre todo para los que participan". La joven cree que el oro que llevan las mujeres, ya sea en collares o pendientes, resulta lo más atractivo para quienes ven el espectáculo, siendo así un elemento "importante". La cantidad de oro que se utiliza queda a discreción de la mujer que lleva el traje tradicional. A algunas mujeres les gusta llevar mucho oro, por lo que utilizan "piezas de oro de toda la familia e incluso de los vecinos".

Como mujer de Viana do Castelo, Isabel, además de toda la "chieira", se siente orgullosa de "continuar un legado dejado por las mujeres" de su ciudad. El orgullo crece aún más porque, desde niña, siempre vio el Desfile da Mordomia y siempre soñó con participar. Cuando tuvo la oportunidad de participar, se sintió realizada al "llevar cerca del pecho" piezas de oro que pertenecieron a sus abuelas.