"Soy partidario de la regulación siempre que no castre la evolución tecnológica, sino que cumpla la función de proteger a los inversores e indicar los beneficios y perjuicios de la tecnología", dijo Fred Antunes en la conferencia online "Criptodivisas: ¿Una solución a qué problema?", organizada por la Asociación Portuguesa de Derecho Digital (APDIG).

Según Fred Antunes, el mercado de las criptodivisas "nace de una esencia un tanto libertaria" y lo "único que pretende es aportar transparencia y justicia a los sistemas financieros y de gestión digital".

"Lo que no puede ocurrir nunca son los escándalos del pasado, donde algunos tienen muchos privilegios y otros ni siquiera tienen derecho a elegir si participan o no en el pago de los privilegios de algunos", dijo.

Por parte del Banco de Portugal, la directora del Departamento de Sistemas de Pago, Rita Bairros, consideró que las monedas digitales no son moneda porque no cumplen las funciones asignadas a las divisas: dada la inestabilidad, no permiten conservar el poder adquisitivo, por lo que no permiten almacenar valor; no son de curso legal (aunque en algunos lugares funcionen como medio de pago); y el valor fluctúa mucho en el tiempo, por lo que no funcionan como unidad de cuenta. "Sin una entidad central, es difícil que las criptodivisas se consideren verdaderas monedas", dijo.

Desde el punto de vista legal, el presidente del Colegio de Abogados dijo que las criptodivisas no cumplen con el principio de curso legal (cuando son aceptadas obligatoriamente como medio de pago) y el principio de nominalismo monetario (aunque pierdan valor, los pagos se realizan en la misma cantidad) . Siguiendo con el tema de los criptoactivos, Menezes Leitão dijo que hay áreas que no están cubiertas por la ley, pero que llegarán a estarlo: "Es normal en un fenómeno nuevo que la ley tarde en intervenir, pero tarde o temprano se regula", dijo.

El mito de la volatilidad

Para Fred Antunes, el Bitcoin "ni siquiera tiene que ser moneda", es más bien un "activo digital, intangible, que en nada se parece a la moneda que estamos acostumbrados a llevar en el bolsillo". Además, consideró que la volatilidad del Bitcoin "es un mito", afirmando que la evolución del Bitcoin en 12 años ha sido de crecimiento y que la volatilidad depende de con qué monedas se compare.

En Europa, dijo, donde no se ha sentido el peso de la inflación (que ahora empieza a notarse), la percepción de la volatilidad del Bitcoin es de una dimensión diferente para quienes viven en Turquía o Brasil, donde sus monedas se están devaluando.

"El Bitcoin será un activo refugio" para los ciudadanos de estos países, pronosticó, y añadió que cree que a medio plazo el Bitcoin será "reconocido como moneda de curso legal por las grandes economías, en el caso de Brasil y Turquía", porque "desde el momento en que en una situación de inflación, la población necesita un activo para 'cubrirse' (cobertura de riesgo) contra los malos resultados del gobierno".