Elisa Ferreira, comisaria europea de Cohesión y Reformas, afirma que los países del Este han conseguido, en los últimos siete años, aumentar su PIB un 5%, pero los países del Sur y del Sudeste "se estancan y se quedan atrás".

"Para que el modelo europeo sobreviva, tiene que hacer frente a la trampa del crecimiento que lleva a los países a crecer hasta cierto punto y luego a estancarse", explica Elisa Ferreira.

Según un informe de ECO, la comisaria explicó que, en los países del sur y el sureste de Europa, después de que "se aborden las primeras deficiencias de inversión estructural, a saber, mediante inversiones en infraestructuras, los países acaban estancándose en una especie de trampa del crecimiento".

El crecimiento es evidente tras las inversiones en carreteras, redes de saneamiento básico, que aportan un "impulso muy grande en términos de desarrollo", que es tanto mayor cuanto más cualificada y barata es la mano de obra, pero en cuanto alcanzan niveles de renta per cápita del 75 por ciento de la media europea, los países parecen "no ser capaces de superarlo", añade Elisa Ferreira.

Reconociendo que el fenómeno requiere una reflexión, la Comisaria recuerda que los fondos de cohesión son una estrategia a largo plazo, con evidencia probada y reconocida: "El Banco Mundial considera que Europa es una máquina de convergencia. La política de cohesión es esencial para mantener a Europa unida, pero, por supuesto, siempre podemos discutir mejoras", añade.