"Naza 10" es el título de la exposición fotográfica "inmersiva" con la que Jorge Leal presenta el trabajo desarrollado en la última década, dentro del proyecto Cañón de Nazaré Norte, que salió a la luz cuando, en noviembre de 2011, Garrett McNamara surfeó la mayor ola del mundo en Praia do Norte.

Antes de ese memorable día, el surfista y fotógrafo ya había "pasado muchas horas caminando por la playa, estudiando las olas, buscando los mejores ángulos para capturar las mejores imágenes", según cuenta a la agencia Lusa.

Del empeño de uno por surfear la mejor ola y del otro por captar los momentos clave de un reto al que "hasta entonces nadie se había atrevido a enfrentarse" surgieron las icónicas imágenes de la mayor ola del mundo, o la famosa fotografía en la que una ola gigante "parece que se va a tragar el faro".

Cualquiera que la vea piensa que la suerte puso al fotógrafo en el lugar y el momento adecuados. Pero Jorge Leal explica que detrás de ese 'clic' hubo "muchas horas mirando al mar", con él su compañero de equipo, 'Tó Mané' (António Manuel Silva), trabajando simultáneamente con una cámara de fotos y otra de vídeo, para asegurarse de que cada momento quedara registrado.

"El récord mundial fue el día mágico", recuerda el fotógrafo que, ese día, también hizo de 'spotter', dando indicaciones al equipo en el agua sobre las olas que se acercaban.

La "'big mama', la madre de todas las olas", no se le escapó aquel día. Tampoco, años después, el récord de Maya Gabeira, la primera mujer que se enfrentó a las olas de Praia do Norte, "donde un accidente la dejó a las puertas de la muerte y donde volvió para establecer un nuevo récord, en una increíble historia de superación".

De las numerosas historias de surfistas como Garrett McNamara, Hugo Vau, Maya Gabeira, Andrew Cotton o Sebastian Steudtner, entre otros, surgieron las 32 fotografías de la exposición, que también incluye vídeos y un documental.

Junto a los surfistas, "las estrellas de la muestra son las olas a las que nadie es indiferente" y que Jorge Leal considera "la octava maravilla natural del mundo".