Sin embargo, la lengua portuguesa no siempre sonó como se escucha hoy en la televisión, en la música o en las conversaciones en los cafés. Durante varios siglos, el idioma ha evolucionado, proceso que sigue ocurriendo hoy en día.

Difícil de aprender

En general, la lengua puede considerarse difícil de aprender. A diferencia del inglés, la lengua portuguesa es binaria, es decir, sólo contiene género masculino y femenino en las palabras. Los adjetivos varían de género, al igual que los artículos que los preceden. Las conjugaciones de los verbos en portugués suelen clasificarse como irregulares, y para cada persona se utiliza una conjugación verbal diferente. Sin embargo, hay varias palabras que, a pesar de tener la misma fonética y ortografía, en determinados contextos tienen significados diferentes. Lo mismo ocurre con los diferentes acentos que se hablan en Portugal y en otros países de habla portuguesa.

Al igual que las demás lenguas del sur de Europa, el portugués deriva esencialmente del latín hablado en el Imperio Romano. Esta derivación confiere una similitud entre las diferentes lenguas habladas en esta región europea.

Cuando los romanos invadieron la Península Ibérica, los que poblaban la región hablaban otras lenguas y dialectos. Una de las políticas de los emperadores romanos fue convertir el latín en la única lengua hablada en el imperio. La población hablaba el latín vulgar, que con el paso de los años se mezcló con las lenguas existentes, creando nuevos dialectos, denominados "romanços". Con el avance del tiempo y con las futuras invasiones árabes, el romance cambió debido al contacto con la lengua árabe. Incluso hoy en día este contacto es evidente en la lengua portuguesa y se puede ver en las palabras que empiezan por "al", la mayoría de las cuales son de origen árabe.

Gallego-portugués

Sólo a partir del siglo XI, después de que los árabes abandonaran el espacio que actualmente es portugués, el gallego-portugués comenzó a hablarse y escribirse oficialmente en Lusitania. Actualmente, el gallego es una lengua existente y se habla en la zona de Galicia, que pertenece a España, sin embargo, tiene muchas similitudes con la lengua portuguesa.

La lengua portuguesa puede dividirse en tres fases fundamentales. La fase protohistórica, en el periodo anterior al siglo XII, donde los textos se escribían en latín. La segunda fase, el portugués antiguo, se divide en dos periodos: del siglo XII al XIV, cuando se escribe en gallego-portugués, y el segundo periodo, del siglo XIV al XVI, cuando el portugués y el gallego se convierten en dos lenguas distintas. Finalmente, la última fase, que comienza en el siglo XVI, se denomina portugués moderno. Durante esta fase, la lengua se vuelve más uniforme y destaca el papel de la literatura renacentista, escrita, por ejemplo, por Luís de Camões.

Nuevos cambios

La forma de escribir la lengua actualmente ha sufrido algunos cambios, el último acuerdo ortográfico, a pesar de la fuerte controversia, se consolidó y se hizo obligatorio, en 2010. El nuevo acuerdo ortográfico pretendía unificar la forma de escribir el portugués en todos los países donde la lengua oficial es el portugués.

El portugués es una lengua llena de historia y con un sonido muy marcado que, cuando se canta, por ejemplo, puede agradar al oído de cualquiera.


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Deeply in love with music and with a guilty pleasure in criminal cases, Bruno G. Santos decided to study Journalism and Communication, hoping to combine both passions into writing. The journalist is also a passionate traveller who likes to write about other cultures and discover the various hidden gems from Portugal and the world. Press card: 8463. 

Bruno G. Santos