No hay nada más molesto que un resfriado común, especialmente uno que no desaparece.

Con tanto enmascaramiento y permanencia en casa, muchos de nosotros no hemos tenido un resfriado propiamente dicho durante un tiempo, lo que hace que la sensación sea aún peor cuando se coge uno.

"Después de pasar la mayor parte de los dos últimos años encerrados, no es de extrañar que muchos de nosotros seamos más susceptibles a las infecciones virales, como el resfriado común", dice Melanie King, farmacéutica de Pharmacy2U.

"La mejor manera de evitar coger un resfriado es mantener un estilo de vida saludable. El estrés emocional, la fatiga, la mala alimentación y el tabaquismo pueden reducir el sistema inmunitario y aumentar las posibilidades de contraer una infección."

Según ella, un resfriado normal dura entre una y dos semanas, y "debería desaparecer por sí solo con el descanso". No hay cura para el resfriado común, pero hay algunas cosas que puedes hacer para ayudarte a sentirte mejor...

1. Comer bien

Es posible que hayas oído la frase "alimentar un resfriado, matar de hambre a la fiebre", pero se trata de un cuento de viejas: ¡debes alimentar a ambos!", dice King. "Aunque no te sientas con fuerzas, comer alimentos nutritivos y equilibrados te dará la energía necesaria para luchar contra una infección".

"También es importante beber muchos líquidos para reponer los que se pierden con la sudoración, y para facilitar que el cuerpo se deshaga de la mucosidad manteniéndola líquida".

El inmunólogo e investigador clínico de A-IR (a-ircr.com), el doctor Ross Walton, coincide en la importancia de una dieta sana y equilibrada. Recomienda alimentos que contengan vitaminas C, D y zinc: "Nutrientes todos ellos que se ha demostrado que favorecen tu salud inmunológica", dice.

2. Toma tus vitaminas

"La vitamina D es un nutriente esencial que puede ayudar a mantener los huesos y los músculos sanos para favorecer la salud general", explica King.

"Nuestro cuerpo normalmente la produce cuando nos exponemos a la luz del sol; sin embargo, en los meses de invierno, cuando estamos más tiempo dentro de casa, puede valer la pena considerar otras fuentes". Aunque no evitará que te resfríes, consumir suficiente vitamina D puede ayudar a tu cuerpo a combatir cualquier infección de forma más eficaz".

La doctora Sarah Brewer, médico de cabecera y directora médica de Healthspan, sugiere también tomar suplementos de vitamina C, ya que podría "mejorar los síntomas y acelerar la curación".

3. Dormir mucho

"Un sueño de buena calidad permite que tu cuerpo descanse, se repare y recupere la salud", señala Walton. "Debes intentar alcanzar un mínimo de siete a ocho horas por noche".

4. Reduce el estrés

"Dado que el estrés puede reducir la eficacia de tu sistema inmunitario para ayudar a tu recuperación, intenta identificar las áreas de tu vida que te causan estrés y tómate tiempo para relajarte", sugiere Walton.

5. Haz algo de ejercicio moderado

Aunque hacer ejercicio puede ser lo último que quieras hacer cuando estás resfriado, Walton señala: "El ejercicio moderado, sólo un paseo de 20 a 30 minutos al día, mejorará tu bienestar y ayudará a tu sistema inmunológico."

6. Ver qué medicamentos pueden ayudar

"Tu farmacéutico puede recomendarte varios medicamentos sin receta que pueden ayudarte a aliviar el resfriado, como los descongestionantes, que pueden ayudarte con la nariz tapada o el goteo", dice King.

"Debes evitar combinar varios productos con ingredientes como el paracetamol, y si no estás seguro, siempre es mejor pedir consejo a tu médico de cabecera o a tu farmacéutico".

7. Prueba el extracto de pelargonium (geranio)

"El pelargonium tiene propiedades antivirales y antibacterianas, y estimula la eliminación de la mucosidad infectada", dice Brewer, quien recomienda tomarlo durante tres días, "o la infección volverá a aparecer".

Si tienes problemas con tus síntomas, sientes que algo no va bien o tu resfriado dura más de 14 días, King dice que esto puede ser un signo de infección bacteriana secundaria, y lo mejor que puedes hacer es contactar con tu farmacéutico o médico de cabecera.