La producción de cereales en el distrito de Beja se ha visto gravemente afectada por la sequía este año, con caídas de "más del 50%", según revelaron hoy los presidentes de una cooperativa y una asociación de agricultores.

En declaraciones a la agencia de noticias Lusa, el presidente de la Cooperativa Agrícola de Beja y Brinches (CABB), Fernando Rosário, reconoció que éste ha sido "un mal año" para los cereales en la zona de influencia de la cooperativa, que abarca principalmente los municipios alentejanos de Beja y Serpa.

"La sequía nos ha perjudicado mucho", y "aunque los cultivos no han perdido tanto potencial en las mejores tierras de los alrededores de Beja, a medida que evolucionamos hacia tierras algo más débiles empezamos a ver pérdidas importantes", dijo.

Rosário añadió que en las llamadas 'arcillas de Beja', los cultivos aguantaron, "pero perdieron gran parte" de su "potencial productivo".

"El significado de esto es que los cultivos se mantuvieron, (...) pero vieron reducido su potencial productivo prácticamente a la mitad. En otras palabras, es un mal año", añadió.

Más al sur, en el llamado Campo Branco, que abarca los municipios de Castro Verde, Almodôvar y Ourique y parte de los de Aljustrel y Mértola, la situación es idéntica, en un momento en el que muchos agricultores ya están cosechando.

"Los rendimientos estuvieron muy por debajo de lo que sería razonable y la producción, tanto de cereales como de paja, fue muy baja, así como la producción de heno y semilla de heno muy reducida", dijo a Lusa el presidente de la Asociación de Agricultores de Campo Branco, José da Luz Pereira.

Según el dirigente de esta asociación, con sede en Castro Verde, la caída de la producción de cereales en esta zona "es muy superior al 50%", y hay zonas "en las que la producción será muy cercana a cero".

Además de que la producción es baja, también carece de calidad, añadió José da Luz Pereira, que atribuyó en parte la situación al hecho de que no hubo lluvias durante el invierno.

"A esta edad, y con todos los años [que llevo] cultivando, no recuerdo que ocurriera esto. Es todo campo desnudo y un año muy difícil", dijo.

Además del impacto en la producción de cereales, el presidente de la CABB también dijo temer el efecto de la actual racha de sequía en el riego del ganado "durante el verano", previendo una reducción del número de cabezas de ganado en la región.

"Todos los años los ganaderos dejan una parte de las crías de su ganado para la cría y este año, por primera vez, hemos comprobado que la mayoría de nuestros productores no están dejando ganado de reposición. Esto es un reflejo de las dificultades que estamos atravesando", concluyó.

El jueves pasado, el Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera (IPMA) reveló que casi todo el territorio continental de Portugal se encontraba en una grave sequía a finales de mayo, la más calurosa y seca de los últimos 92 años.

A finales del mismo mes, también se produjo una disminución significativa de la cantidad de agua en el suelo en todo el territorio, especialmente en las regiones del Norte, Centro, Valle del Tajo, Alentejo y Algarve, donde hay valores de agua inferiores al 20%.