"Queremos convertirlo en una referencia nacional y demostrar que es fundamental. Que no es sólo un proyecto piloto, sino una necesidad para la sociedad portuguesa. Queremos que se extienda por todo Portugal y que cada distrito tenga un refugio de emergencia. Debería ser una respuesta obligatoria", dijo Fábio Simão, presidente del Movimiento de Apoyo al Problema del Sida (MAPS).


El centro, ubicado en un edificio que estaba desocupado y que fue prestado por el Ministerio de Agricultura, en Braciais, en las afueras de Faro, acogerá a personas y familias "en situación de desprotección", afectadas por casos de precariedad, es decir, desempleo, violencia doméstica o falta de vivienda.




Este centro de acogida de emergencia, inaugurado oficialmente el 7 de septiembre pero abierto desde el 1 de septiembre, cuenta con un total de 46 camas, aunque por ahora sólo se podrán utilizar 30, e incluye también un comedor, cocina, lavandería, vestuarios, oficinas técnicas y de enfermería y una sala de formación profesional.


"Ya hemos recibido a ocho personas, en casos de emergencia. Dos personas que ya se han marchado, y otras seis, que se han trasladado a un alojamiento temporal durante tres meses, que se puede renovar por otros tres", dijo Fábio Simão.


El MAPS pretende "estabilizar la vida" de las personas que recibe en el centro y contribuir a su reinserción en la sociedad, "escuchando a cada persona, intentando comprender su historia y tratando de ayudarles en lo que pretenden hacer a continuación."


"Tenemos aquí a personas que, por alguna razón, han quedado en la indigencia. El proyecto actúa de inmediato: tenemos aquí personas que han dormido una sola noche en la calle, o dos días en el coche. Traer a una persona aquí y darle la oportunidad de tener un espacio para reconstruirse es una oportunidad única que evita daños peores en el futuro", destacó el presidente de la organización benéfica con sede en Faro.


La renovación del edificio se llevó a cabo en los últimos dos años, con un coste de unos 600 mil euros - con el apoyo del ayuntamiento (180 mil euros) y la suma restante garantizada por el MAPS, incluyendo un préstamo bancario de 310 mil euros y la mayor parte del material fue donado por varias empresas y hoteles, además de particulares.


La ministra de Trabajo, Solidaridad y Seguridad Social, Ana Mendes Godinho, estuvo presente en la inauguración oficial del refugio de emergencia y elogió el ejemplo dado por el Algarve por la "estrategia articulada" entre la Comisión de Coordinación y Desarrollo Regional, los gobiernos locales, la Seguridad Social y el sector social.


"Es una red de respuesta social integrada. Garantiza que la respuesta no se diseñe en función de un solo municipio, sino de la región, y permite la capacidad de gestionar las respuestas de emergencia", dijo el gobernador.


Además de otro refugio de emergencia situado en Braga, este es el segundo proyecto piloto puesto en marcha junto con la Linha 144 - Línea Nacional de Emergencia Social.


"Necesitamos entidades dispuestas a formar parte de este servicio colectivo. Queremos que los edificios que pueden ser incluso sin uso, pero se puede convertir a las respuestas sociales en colaboración entre el gobierno central, el gobierno local y el sector social ", dijo.