Para muchos inversores, la respuesta automática al ver que el valor de sus acciones cae drásticamente en poco tiempo es el pánico, seguido por el impulso instintivo de "cortar las pérdidas" y cobrar estas inversiones antes de que se expongan a daños adicionales. En la mayoría de los casos, ésta no es la mejor forma de actuar y podría acabar costándole mucho más a largo plazo. Pero, ¿cómo se puede resistir el impulso de vender en tiempos como estos?

¿Por qué reaccionan así los inversores?

La ciencia del comportamiento sugiere que lo primero que hay que hacer cuando se experimenta la ansiedad descrita anteriormente es reconocer que es una reacción perfectamente natural para todos los inversores, incluso los más experimentados. Es, sin duda, una experiencia desconcertante ver caer el valor de un activo. Es precisamente esta falta de control, combinada con la imprevisibilidad de las fluctuaciones del mercado, lo que precipita ende las fluctuaciones del mercado lo que precipita en la gente la tentación de vender. Sin el consuelo de que el mercado se estabilice y recupere su posición anterior, es demasiado fácil imaginar el peor escenario posible: que el valor de sus inversiones caiga hasta no valer casi nada, dejándole sin nada que mostrar después de años de ahorro. Es importante recordar que este escenario es increíblemente raro y que las inversiones suben y bajan. Sin embargo, es fácil olvidarlo cuando los tiempos son difíciles.


Cómo resistir el impulso de vender

Incluso si es consciente de que vender durante un mercado bajista puede no ser una decisión inteligente, a veces eso no es suficiente para resistir el impulso de hacerlo. Sin embargo, hay algunas cosas que puede tener en cuenta para reforzar ese mensaje cuando se sienta ansioso por aguantar hasta que el mercado se recupere.

Aunque no seamos capaces de predecir el futuro, sí podemos consolarnos con el pasado. en el pasado. Al reflexionar sobre anteriores periodos de inestabilidad económica, podemos ver que el mercadosiempre acaba recuperándose, y con él, el valor de las acciones y las inversiones. Si siente la tentación de vender, intente recordar que, históricamente, los datos están de su lado y que suele ser cuestión de tiempo que la situación mejore.

También puede ser útil tener en cuenta la permanencia de la decisión de vender; una vez tomada esa decisión, el valor de sus inversiones está bloqueado y no hay más remedio que vender.Una vez tomada la decisión, el valor de sus inversiones queda bloqueado y no hayvuelta atrás. Mientras su inversión sigue activa, su valor es fluido y puede cambiar, pero la decisión de vender no puede deshacerse.

Si conoce los fundamentos de la inversión, sabrá que la mayoría de las veces se trata de una estrategia a largo plazo; estadísticamente, cuanto más tiempo se mantenga una inversión, más probable será que se produzca un mercado bajista mientras se posean los activos invertidos.ssets. Aceptar un mercado turbulento como algo inevitable en algún momento puede ayudar a replantear su perspectiva de la situación.

¿Hay algún escenario en el que deba vender?

Hay algunos escenarios en los que posiblemente sea correcto vender, pero son pocos y distantes entre sí. Por ejemplo. Si tiene la mayor parte de sus activos invertidos y es probable que necesite disponer de dinero en efectivo a corto plazo, vender podría ser la mejor manera de asegurarse de que esto sea posible. Si no puede esperar a que el mercado se recupere, corre el riesgo de verse obligado a vender en el punto más bajo del mercado, con lo que la rentabilidad de su inversión sería aún peor que si hubiera vendido antes. Se trata de una decisión que hay que considerar con sumo cuidado y que no debe tomarse a la ligera.

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