Los datos de un nuevo estudio, desarrollado por investigadores de los Centros de Investigación y Estudios en Sociología(CIES-Iscte), Investigación en Ciencias de la Información, Tecnologías y Arquitectura(ISTAR-IUL) y Recursos Naturales y Medio Ambiente(CERENA), fueron recogidos por 80 sensores, entre agosto de 2021 y julio de este año.

En una nota de los autores, se explica que se realizó un análisis de los valores de dióxido de nitrógeno (N02) y partículas en suspensión PM10, concluyendo que, en determinadas zonas de la ciudad de Lisboa, "superan los parámetros aceptados" por la OMS.

"La terminal de cruceros de Santa Apolónia, así como los carriles bici de ciertas arterias de la capital, son zonas con altos niveles de contaminación y perjudiciales para la salud. La investigación en curso corrobora, tras estudios anteriores, el elevado tráfico y el transporte marítimo como factores determinantes en las situaciones de contaminación registradas en el municipio de Lisboa.

En cuanto al dióxido de nitrógeno, los investigadores constataron que, en el período analizado, los valores en la ciudad de Lisboa fueron, en promedio, de 71,08 μg/m3, "muy por encima del nivel definido por la OMS", que es de 10 μg/m3.

La Calçada de Carriche (Lumiar), la Alameda da Encarnação, la Avenida 24 de Julho y la Avenida Infante Dom Henrique, en Santa Apolónia, fueron las zonas con mayores niveles de contaminación por dióxido de nitrógeno.

En cuanto a la concentración de partículas en suspensión PM10, los niveles más preocupantes se detectaron en Calçada da Ajuda, Rua dos Sapadores (Graça), Avenida Fontes Pereira de Melo, Avenida Alfredo Doutor Bensaúde (Olivais) y Calçada de Carriche.

Para las partículas PM10, la OMS establece el límite medio diario en 45 ug/m3 y el límite medio anual en 15 ug/m3.

"Aunque en ninguno de los sensores utilizados se superó el límite medio diario en más del 10% de los días, el valor medio anual fue de 15,7 μg/m3, superando ligeramente el límite definido por la OMS", explican los investigadores.

Según las conclusiones del estudio, el tránsito y el transporte marítimo se identifican como posibles causas de que los niveles de contaminación superen los parámetros establecidos por la OMS.

Además de estos factores, el estudio también apunta a cuestiones como la calefacción residencial y comercial, la construcción y la industria como elementos contaminantes, además de "fenómenos naturales como el transporte de polvo desde el desierto del Sahara".

Según los autores de este estudio, la OMS afirma que "la exposición al dióxido de nitrógeno y a las partículas PM10 aumenta el riesgo de enfermedades crónicas, como las infecciones respiratorias agudas, las enfermedades cardiovasculares, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el cáncer de pulmón".