"Se trata del fósil de hormiga más antiguo hallado en una isla de origen volcánico y el primer registro para las islas macaronésicas [Madeira, Azores, Canarias y Cabo Verde]", afirma la institución en un comunicado.

El estudio sobre el fósil está firmado por Carlos Góis Marques(Universidad Complutense de Madrid, España), Pedro Correia(Universidad de Coimbra), André Nel(Muséum National d'Histoire Naturelle, Francia), José Madeira(Universidad de Lisboa) y Miguel Menezes de Sequeira(Universidad de Madeira) y publicado el lunes en la revista científica "Historical Biology".

"Hasta ahora, se desconocía cuando estos insectos llegaron a la isla de Madeira", indica la Universidad de Madeira, explicando que, según la bibliografía, las hormigas son dispersores muy ineficaces, y el cruce de los océanos por aire o incluso en balsas naturaleza se considera un evento raro.

"En todo el mundo, hay archipiélagos que no tienen hormigas nativas, como es el caso del archipiélago hawaiano, donde todas las especies que se encuentran ahora fueron introducidas por los humanos".

Según la Universidad de Madeira, el fósil hallado en la isla es un fragmento de ala de una hormiga alada, que se encontraba en sedimentos de un millón trescientos mil años de antigüedad.

"Este fósil es de importancia internacional, ya que demuestra que, después de todo, una especie de hormigas consiguió cruzar el océano y llegar a la isla de Madeira de forma natural", subraya la institución, reforzando que se trata del fósil más antiguo de una hormiga encontrado en una isla de origen volcánico.