Cerca de dos tercios de los portugueses residentes en el Algarve consideran que una parte o la totalidad de sus ingresos familiares proceden del sector turístico.

De los más de 4.000 encuestados validados por el proyecto RESTUR (Actitudes y Comportamientos de los Residentes: Contribuciones al Desarrollo de una Estrategia de Turismo Sostenible en el Algarve), el 67% (%) obtiene ingresos del turismo, el 57% desempeña profesiones vinculadas al sector y el 47% tiene familiares directos que trabajan en esta actividad económica.

"Constatamos, como esperábamos, que hay un porcentaje muy elevado de personas que tienen su actividad profesional relacionada con el turismo, o que de alguna forma su hogar se beneficia de estar profesionalmente involucrado en el turismo", señaló Patrícia Pinto, profesora de la Universidad del Algarve y responsable del estudio, inédito por englobar, por primera vez, las opiniones de los residentes en los 16 municipios del distrito de Faro.

El coordinador de CinTurs - Centro de Investigación en Turismo, Sostenibilidad y Bienestar de la Universidad del Algarve, que habló con los periodistas al margen de la presentación del estudio, destacó que los residentes del Algarve "perciben que el turismo tiene importantes impactos positivos en la región".

En el ámbito del proyecto RESTUR -cuyos datos pueden consultarse en www.restur.pt -, se recogieron y validaron 4.026 cuestionarios durante las temporadas alta y baja de actividad turística en el Algarve, en los periodos anterior y posterior a la pandemia de covid-19, pero sólo entre ciudadanos portugueses. Los residentes extranjeros quedaron fuera de esta encuesta.

Más del 90% de los encuestados señalan que el sector aumenta las oportunidades de empleo y contribuye al desarrollo de la economía local, mientras que ocho de cada diez algarvíos afirman que el turismo crea más negocios para la población residente.

Los residentes también tienen "una opinión favorable de su interacción con los turistas" y "les gusta" que el Algarve sea un destino turístico consolidado, mantuvo Patrícia Pinto.

"Están dispuestos a adoptar algunas prácticas que puedan ayudar a la región a seguir siendo un buen destino turístico, a proteger los recursos naturales, a implicarse en la promoción del destino", añadió.

Impactos negativos

En cuanto a los "impactos negativos importantes" a nivel económico, el 91,5% indica que la actividad turística aumenta el precio de las viviendas y del suelo, el 86,4% afirma que el turismo incrementa el coste de la vida y el 75,5% señala que los bienes y servicios son más caros.

A la pregunta de si están dispuestos a pagar más tasas que puedan beneficiar al turismo, sólo el 14% responde afirmativamente, mientras que los impactos medioambientales se consideran más negativos que positivos: el 68% especifica problemas de tráfico, aparcamiento y accidentes y el 66,2% señala que el turismo aumenta la contaminación, la basura y el ruido.

El presidente del Patronato de Turismo del Algarve, João Fernandes, afirmó que el estudio demuestra que, entre los residentes, "no existe una actitud de resistencia, o antiturismo, lo que es muy positivo para un destino ya maduro que sigue el camino en este sector desde los años 60 [del siglo pasado]".