Las obras de construcción, que tendrán una superficie de diez mil metros cuadrados, comenzarán a finales de año, y la empresa espera tenerla en funcionamiento dentro de 2 años.
"Estamos ultimando el proyecto", dijo a Lusa Daniel Redondo, director general de J. Carranca Redondo, productora de Licor Beirão, "pero va muy rápido, ya que tenemos la urgencia de ponerlo en marcha lo antes posible". La nueva unidad de producción deberá emplear a 40 personas una vez que las operaciones estén a "velocidad de crucero".
Según Redondo, esta fábrica responderá a la necesidad de "aumentar la capacidad de producción" en un momento en el que la empresa está dando "un gran impulso al crecimiento internacional de la marca."
"Necesitamos una zona de almacenamiento más grande para nuestros productos secos, habrá alguna producción de productos específicos, nuevas líneas de llenado y nuevos procesos de acabado de las botellas, alguna innovación en el embotellado, que permitirá confeccionar productos al ritmo que necesitamos", destacó el director general, quien afirmó que con sus actuales instalaciones la empresa no podría crecer.
Los diez millones de euros que se van a destinar a la construcción de la fábrica y a la compra de equipamiento para la misma son la principal inversión de la empresa en estos momentos, apostando por "el área comercial y de marketing" para hacerse con una cuota de mercado fuera de Portugal.
"Las exportaciones representan, en este momento, cerca del 25% de nuestros ingresos y esperamos poder llegar rápidamente al 50%. Es un objetivo que se está desarrollando para dentro de unos años, pero queremos acelerarlo", comparte Daniel Redondo.
En los últimos tiempos, la marca ha estado haciendo negocios en España y desea crecer en otros países europeos como Francia y Alemania, donde ya tiene cierta presencia. "En Francia y Alemania nos asociamos con otra organización. En el pasado, hemos tenido el mercado de la comunidad portuguesa, pero queremos expandirnos también fuera de esa comunidad y ser un producto que se pida en todo el país, en general. Queremos dejar de ser un producto étnico y convertirnos en una marca global", explicó el director general.
Para Daniel Redondo, este proyecto "es una maratón" y un "proceso difícil".
"Es una marca muy específica e iremos ganando consumidores poco a poco, que entiendan y valoren la cultura portuguesa", aclaró, destacando la gran conexión entre Licor Beirão y la identidad portuguesa.
Para el director general, el hecho de que Licor Beirão sea "una marca tan portuguesa" también permite a la empresa beneficiarse del aumento del turismo en el propio Portugal.