"El terreno accidentado de la isla de Madeira siempre ha sido un gran obstáculo para la movilidad de la población, pero en los últimos dos decenios se ha hecho un esfuerzo extraordinario para construir nuevas infraestructuras viarias, lo que ha dado lugar a un cambio radical en términos de accesibilidad", dijo Fino.
Habló en la recepción de 30 miembros de la Asociación Eslovena de Carreteras del Nordeste de Eslovenia en Funchal, en la que destacó los "grandes desafíos" impuestos por las "características naturales" de la red de carreteras, túneles y puentes.
"Madeira es sin duda un ejemplo de planificación, financiación, construcción, modernización y mantenimiento de carreteras que permiten un tráfico seguro y racional", dijo.
La Asociación de Carreteras del Nordeste de Eslovenia se estableció en 1985 en la ciudad de Maribor (Eslovenia) y reúne a elementos de diversas esferas empresariales, incluidos profesionales y aficionados de la construcción y el transporte.
El propósito de la visita a Madeira es compartir conocimientos, teniendo en cuenta que la región autónoma es un "ejemplo" de inversión en carreteras.
Pedro Fino destacó que el próximo año la Presidencia del Consejo de la Unión Europea se dividirá entre dos países -Portugal en el primer semestre y Eslovenia en el segundo semestre- y que, por lo tanto, es importante mostrar a este país "la excelente utilización de los fondos estructurales en la región, que han permitido el desarrollo y la mejora de la calidad de vida de las poblaciones".
Desde su fundación, la Asociación de Carreteras del Noreste de Eslovenia ha organizado excursiones educativas y profesionales para mostrar los proyectos y soluciones de transporte por carretera en diversas partes de Europa.
"La idea que subyace a estas iniciativas es establecer contactos útiles e intercambiar experiencias profesionales con expertos extranjeros en la construcción y el transporte por carretera, ampliando así sus horizontes profesionales", explicó Pedro Fino.