Según las cifras correspondientes a los meses de marzo a septiembre, las muertes en casa aumentaron un 18 por ciento durante este período, mientras que las que aún no se han explicado aumentaron un 24 por ciento. En general, la tasa de mortalidad de Portugal aumentó en más de 6.000 en los últimos seis meses, con algo menos de 2.000 atribuidas a covid-19.