Los expertos, reunidos hoy en Infarmed, sugieren también que el certificado digital, ahora obligatorio para acceder a restaurantes, establecimientos turísticos, alojamientos locales y espectáculos culturales, se utilice sólo "en el contexto de la salud laboral" y recomiendan que, en lugares al aire libre, el uso de la máscara protectora se limite a zonas con alta densidad de población.

Pruebas

También defienden que ya no hay recomendación para el teletrabajo, debiendo realizarse el trabajo presencial sin limitaciones, y en cuanto a las pruebas, las recomiendan en poblaciones de mayor vulnerabilidad (ingreso en domicilios y antes de la hospitalización), empleados de preescolar, en lugares de mayor riesgo de transmisión y cuando haya síntomas, en el contexto del diagnóstico.

Considerando que están dadas las condiciones para reducir las medidas, Raquel Duarte, del ARS Norte, Instituto de Salud Pública de la Universidad de Oporto y del Instituto de Ciencias Biomédicas Abel Salazar, recordó, sin embargo, que "es necesario mantener la vigilancia" y que "hay amenazas que no deben ser olvidadas", como el acceso desigual a las vacunas en el mundo, que puede potenciar la aparición de nuevas variantes.

Menos restrictivo

Recordaron que, en el contexto europeo, Portugal es uno de los países con medidas menos restrictivas y llamaron la atención sobre la necesidad de mantener la vigilancia de los más vulnerables, como los ancianos que viven en instituciones o están hospitalizados y los que trabajan en los servicios sanitarios.

Los especialistas consideraron que este es "el momento ideal" para pasar a las denominadas medidas de nivel 1 -con evaluación quincenal- y señalaron que los siguientes pasos requieren centrarse en la monitorización, la vacunación, la ventilación y el uso de mascarillas en entornos de riesgo (hogares y unidades sanitarias).

En el monitoreo, señalaron el sistema de vigilancia de infecciones respiratorias, discutido en la reunión por Ana Paula Rodrigues, especialista del Instituto Nacional de Salud Dr. Ricardo Jorge, y en la vacunación, señalaron la necesidad de "jugar con la estacionalidad" y definir qué población es elegible para las vacunas.

Raquel Duarte también destacó la necesidad de una buena ventilación de los espacios y de preparar a la población para un cambio de comportamiento, utilizando medidas de protección siempre que se presenten los síntomas.

"Es necesario ritualizar los comportamientos, no es aceptable descuidar la higiene de las manos, o no mantener una distancia social o no usar mascarilla si tenemos síntomas", dijo.

Raquel Duarte defendió la necesidad de preparar a la población para el cambio de comportamiento, mejorando la alfabetización, modificando las conductas ante los síntomas e insistiendo en el "uso rutinario de medidas no farmacológicas ante el riesgo de transmisión" y la evitación del lugar de trabajo/escuela ante cualquier síntoma de la enfermedad.

Cambio

"Estamos asistiendo a un cambio de paradigma, derivado de la alta tasa de vacunación y la menor gravedad de las manifestaciones clínicas asociadas a la variante Omicron. Es el momento de aliviar las medidas, manteniendo la vigilancia y la alerta", dijo el funcionario, y agregó que "es necesario capitalizar lo aprendido con Covid-19 y promover el cambio de conducta asociado a medidas no farmacológicas".

También recordó que "habrá nuevas variantes, nuevos brotes" y que es necesario "mantener la vigilancia" y "ajustar las medidas al riesgo".