Los conductores portugueses se sienten más cómodos conduciendo sus vehículos en la autopista que en entornos urbanos, donde obtienen peores resultados medioambientales, según un estudio de la Universidad de Aveiro (UA).

En un intento de estudiar los patrones de conducción, un equipo de investigadores de la UA llevó a cabo una investigación que evalúa el comportamiento de los conductores mediante la definición de casos prácticos a través de un simulador de conducción, en el que varios participantes realizaron pruebas de conducción en diferentes escenarios.

"Se pidió a los voluntarios que llevaran un smartwatch para registrar los datos de la frecuencia cardíaca para analizar el estrés mientras conducían. En total, la investigación contó con más de 42.000 segundos de datos obtenidos", describe una nota de la UA.

Comportamiento agresivo

Según la directora del Máster en Movilidad Inteligente y coordinadora de la investigación, Margarida Coelho, el estudio permitió analizar la correlación del comportamiento del conductor (concretamente, la agresividad durante la conducción) con los impactos desde el punto de vista de la seguridad y las emisiones.

También se compararon diferentes entornos de conducción (urbano, carretera nacional y autopista), con especial atención a las singularidades de la carretera (badenes, semáforos, pasos de cebra, etc.).

"Los resultados de la investigación indican que los conductores se sienten más cómodos conduciendo su vehículo en autopistas que en entornos urbanos, donde obtienen peores resultados en términos medioambientales. Además, los participantes mostraron reacciones similares ante las mismas situaciones, incluso con estilos de conducción diferentes", afirma el equipo de investigadores.

Los resultados del estudio también indican que las señales de stop, los badenes y las situaciones imprevisibles, como animales o peatones que cruzan la carretera, se asocian normalmente con aceleraciones y frenadas bruscas y son condiciones que se asocian con altas emisiones contaminantes.

A pesar de los esfuerzos de la industria del automóvil por reducir el impacto medioambiental, Margarida Coelho considera que los conductores tienen un papel "muy importante" (a través de su comportamiento en la carretera) en la reducción de las emisiones de gases y en la promoción de una mayor seguridad vial.

"Anticiparse a las decisiones, cumplir con los límites de velocidad, conducir suavemente a una velocidad lo más constante posible, evitar aceleraciones/desaceleraciones y frenadas bruscas, son algunas de las formas de desarrollar la ecoconducción", defiende la investigadora.

Según datos de la Autoridad Nacional de Seguridad Vial, entre enero y diciembre de 2021 se produjeron 30.691 accidentes con víctimas en Portugal, con el resultado de 401 muertos, 2.297 heridos graves y 35.877 heridos leves.