"Como balance de la actuación, se inspeccionaron 124 operadores económicos, incoándose cuatro expedientes de infracción administrativa, destacando como principal infracción la falta de publicación de información obligatoria, a saber, matrícula del vehículo, precio, año de fabricación, registros anteriores de propiedad, plazo de garantía y kilómetros, entre otros, que permitan al consumidor realizar una elección más informada", señaló la ASAE en un comunicado.
La operación de inspección se llevó a cabo en todo el país y se dirigió a los operadores económicos que venden coches nuevos y usados, "con el fin de verificar el cumplimiento de las normas disciplinarias a las que están sujetos".
Según la ASAE, en los stands de coches nuevos se verificó el cumplimiento de las normas relativas a la información sobre consumo de combustible y emisiones de dióxido de carbono a disposición del consumidor.
En los stands de coches usados, se inspeccionó la existencia de la información obligatoria, que debe constar en un documento escrito, firmado por el vendedor o intermediario, y fijado al vehículo, "de forma visible y disponible para el consumidor".