"Esta recreación de Portugal es nuestra primera obligación en este nuevo ciclo de nuestra historia, 50 años después de haber alcanzado la democracia y la libertad", dijo el Jefe de Estado en la ceremonia militar de conmemoración del 10 de junio, en Lagos, Algarve.

En su último discurso como Presidente de la República en el Día de Portugal, Día de Camões y Día de las Comunidades Portuguesas, que duró unos 10 minutos, Marcelo Rebelo de Sousa optó por recordar el pasado.

"Pero recordar es también recrear. Tenemos el deber de recrearnos, de superarnos, de cuidar mejor de nuestro pueblo, para que sea más numeroso, más culto, más atraído a quedarse en esta patria formada por un rectángulo y dos archipiélagos, si quiere quedarse, o a irse y volver, y no perder nunca la añoranza de la tierra, si quiere irse", argumentó.

Según el Presidente de la República, es necesario "cuidar más de lo que se puede y se debe hacer, producir, innovar, invertir, exportar y, sobre todo, proveer a los que viven en ella".

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"Ocuparse de los que se han quedado o se están quedando atrás. Son siempre entre dos y tres millones, y son muchos desde hace mucho tiempo, régimen tras régimen, situación tras situación, intolerablemente muchos, demasiados", prosiguió, condenando la pobreza que persiste en el país.

El Jefe de Estado y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas pidió también que se cuide de los emigrantes portugueses, "compatriotas que cada día crean Portugal en todo el mundo", y "del mar, de los océanos".

"Debemos alimentar nuestra fraternidad con los pueblos y Estados que, como nosotros, hablan portugués y hacen del portugués una gran lengua mundial. Debemos alimentar nuestra pertenencia a una Europa unida, abierta, que cree en los valores humanos, en la dignidad, en el respeto a las personas, a sus derechos y deberes, a su diversidad cultural y de vida", añadió.

Marcelo Rebelo de Sousa concluyó su último discurso como Presidente de la República en el día festivo del 10 de junio con un homenaje a los militares y al antiguo Jefe del Estado, el General Ramalho Eanes, a quien condecoró.

El Presidente de la República afirmó también que, cuando deje el cargo, dejará de intervenir políticamente, pero que pretende estar presente en todas las ceremonias oficiales como antiguo Jefe de Estado.