Hay varios tipos de Nanobots que varían en uso y capacidades, en un espectro de microcirugía, imitación de células sanguíneas, caza y destrucción de células malignas, alimentación de medicamentos, detección y seguimiento de la enfermedad. A continuación se presentan algunos de los nanobots que se utilizan actualmente en los servicios sanitarios de todo el mundo.

Los nanobots conllevan numerosos problemas éticos, sobre todo en el ámbito de la recuperación de datos y el control de los fármacos liberados en el cuerpo humano. Sin embargo, las ventajas residen en el potencial futuro para tratar ciertas enfermedades como el cáncer y las cardiopatías y para realizar microcirugía, un avance en la ciencia médica.

A continuación, algunas de las aplicaciones actuales de la tecnología...

La PillCam es una cámara ingerible que existe desde 2001 y fue el primer nanobot aprobado por la FDA. Hasta la fecha, se ha utilizado en más de 2 millones de procedimientos.

La cápsula Vibrant vibra para promover la contracción muscular y ayuda a la digestión. Puede tratar el estreñimiento sin laxantes.

La píldora de seguimiento de dosis tiene sensores que transmiten datos a un parche que lleva el paciente. Dispone de una aplicación en la que la información, como la dosis del medicamento y los horarios, puede compartirse con los médicos.

La cápsula Atmo Gas tiene una superficie permeable que permite la entrada de gases en la cápsula. Así se pueden recoger datos sobre los niveles de oxígeno, hidrógeno y CO2. Esto es muy valioso para los médicos y científicos en su investigación del intestino humano.

La cápsula con sensor inteligente del MIT es un nanobot que se aloja en el estómago y permanece allí durante un mes. Cuenta con un mecanismo de liberación automática de fármacos para los pacientes que siguen un régimen estricto de medicación.