El alcalde de Monchique, Rui André, presentó la propuesta de crear un fondo de emergencia después de que el Gobierno anunciara que los daños ya podían ser comunicados a la Dirección Regional de Agricultura y Pesca (DRAP) del Algarve, al considerar que este apoyo sería "muy burocrático" y "desajustado" a las necesidades de los afectados, como ocurrió tras el gran incendio de 2018.

"Tras el incendio que se produjo el 17 de julio en Monchique y que se extendió al municipio vecino de Portimão, hubo una superficie total quemada de 2.134 hectáreas. En Monchique se quemaron 656 hectáreas [ha], en su mayoría zonas arboladas (271 ha), pero también una zona de bosque de producción de eucaliptos (163ha), alcornoques (130ha) y pinos piñoneros (25ha)", cuantificó el municipio en un comunicado.

Los equipos del municipio "ya realizaron una primera evaluación de los daños" y constataron que 33 hectáreas afectadas eran "para pastos" y unas 30 hectáreas estaban ocupadas con "tierras agrícolas y huertos".

Tras reunirse el lunes con los perjudicados, en presencia de responsables del DRAP Algarve, el Ayuntamiento de Monchique consideró que este nuevo proceso de ayudas sería "similar al de los incendios de 2018", con "mucha burocracia y un apoyo inadecuado" a las necesidades reales" de los afectados.

"Por ello, la Junta Municipal de Monchique decidió el pasado 20 de julio crear un mecanismo simplificado de apoyo a estos damnificados en el municipio de Monchique para que puedan recuperarse rápidamente de los daños causados por este incendio".

El Ayuntamiento de Monchique declaró que el "fondo de emergencia" tiene como objetivo "ayudar a los pequeños agricultores de forma rápida y no burocrática cuyas pérdidas no superen los 500 euros y se destinen a la rehabilitación de los sistemas de riego, sustitución o reparación de maquinaria/motores, tuberías y vallas para animales".

"Tras la presentación de los daños y después de ser validado por el municipio, el material necesario se pondrá a disposición de inmediato en la Cooperativa Agrícola o en otros espacios comerciales del municipio, que podrán ser recogidos por los perjudicados, que tienen un plazo máximo de 30 días para su aplicación", aclaró el municipio del distrito de Faro.

El uso de la ayuda concedida por el municipio a través de este mecanismo no impide, sin embargo, que los perjudicados presenten "futuras solicitudes" para cubrir "otras pérdidas de mayor valor".