"Tanto la contaminación acústica como la atmosférica, el turismo de masas y la crisis inmobiliaria que provoca, y la emisión de gases de efecto invernadero de la aviación, apuntan a la misma solución. Es sencilla y suave. Es necesario reducir el tráfico aéreo", dicen las organizaciones, que lanzan el llamamiento ante "la intención de las élites políticas y económicas de aumentar la capacidad aeroportuaria de la capital".

En el llamamiento (abierto a la suscripción en https://aterra.info/lisboa-com-os-pes-na-terra/ ), las organizaciones consideran que la aviación es un peligro tanto para la salud de la población como para la salud planetaria, y piden solidaridad con quienes sufren los impactos del tráfico aéreo y la expansión de los aeropuertos, en Portugal y en el resto del mundo.

"La crisis ecológica es una oportunidad para cambiar radicalmente a mejor", afirman las organizaciones, considerando que ello pasa por "reducir la capacidad total instalada en los aeropuertos de Lisboa, Oporto, Faro y Beja", y promover el ferrocarril.

Las organizaciones destacan que el aeropuerto es la mayor fuente de contaminación de Lisboa y una amenaza para la salud y el bienestar de la población, con aviones que sobrevuelan Lisboa y Loures cada dos minutos y medio.

Además de reducir los aviones, las organizaciones defienden en el documento que se desarrolle el ferrocarril como medio de transporte para los viajes de media y larga distancia, conectando Portugal, de día y de noche, con España y el resto de Europa, y haciendo también conexiones en todo el país.

Las organizaciones ATERRA, Campo Aberto, Climáximo, GAIA, Left Hand Rotation, Morar em Lisboa, Rede para o Decrescimento y Stop Despejos han firmado el llamamiento.