Según la Marina portuguesa, Praia de Faro registró 25,7 grados centígrados en el agua del mar, un valor que supera la media de la última década y se acerca al récord nacional.
El anterior máximo absoluto también se registró en la misma playa, el 28 de julio de 2016, con 26,5 grados.
Según la misma fuente, este aumento se produjo por la combinación de varios factores, entre ellos la ausencia de vientos fuertes, el oleaje débil y la elevada radiación solar.
Estos elementos favorecen el calentamiento superficial del agua, especialmente en las zonas costeras menos expuestas a la circulación atlántica.
Según la Marina portuguesa, cuando estas condiciones persisten durante varios días consecutivos, las aguas de la costa del Algarve alcanzan temperaturas más altas de lo habitual, creando escenarios inusuales para la estación estival.
Otra de las zonas de baño con temperaturas del agua superiores a la media es la playa de Altura, en el municipio de Castro Marim.
Según los registros, durante el verano es posible encontrar allí valores entre 21,2 y 24 grados centígrados.
La misma fuente menciona que la orientación de la costa y la poca profundidad de las aguas cerca de la orilla contribuyen a una retención térmica superior, lo que hace que estas playas sean especialmente atractivas para baños prolongados.
La temperatura del agua de la playa de Albufeira también sigue esta tendencia.
Según la Marina portuguesa, los termómetros vienen registrando valores en torno a los 21,1 grados, lo que hace que la experiencia del baño sea más confortable para residentes y visitantes.
La misma fuente explica que, aunque ligeramente inferiores a los máximos registrados en Faro y Altura, estos valores se mantienen por encima de la media de la costa sur, que suele registrar aguas más frías incluso en los meses de verano.