Los datos se incluyen en el informe 2025 de la Agencia Antidroga de la Unión Europea(EUDA), que concluye que las cifras de incautaciones confirman que la disponibilidad de cocaína en Europa sigue siendo elevada y que, por séptimo año consecutivo, los Estados miembros se incautaron de cantidades récord.

Según el documento, en 2023 se incautaron un total de 419 toneladas de cocaína en varios países europeos, frente a las 323 toneladas de 2022.

Bélgica (123 toneladas), España (118) y los Países Bajos (59) representaron casi tres cuartas partes (72%) de la cantidad total incautada, lo que subraya su papel como principales puntos de entrada de la cocaína traficada en Europa, añade el informe, aunque señala que los datos preliminares para 2024 sugieren que esto podría cambiar.

"Otros países también están en el punto de mira como puntos de entrada", afirma la EUDA, citando a Alemania, con 43 toneladas, Francia, con 23, y Portugal, con un total de 22 toneladas incautadas en 2023, frente a las 17 de 2022.

Las grandes incautaciones realizadas en los puertos europeos ponen de manifiesto cómo los traficantes de drogas ilícitas siguen explotando las cadenas de suministro comercial, advierte el informe, que destaca el ejemplo de España, que en 2024 registró la mayor incautación de cocaína en un solo envío -13 toneladas- oculta en plátanos procedentes de Ecuador.

Según la agencia con sede en Lisboa, la cocaína es la droga estimulante más consumida en Europa -alrededor de 4,6 millones de europeos de entre 15 y 64 años la consumieron el año pasado- y la segunda más declarada por las personas que inician un tratamiento contra las drogas por primera vez (35.000 en 2023, frente a 31.500 en 2022).

En Portugal, los datos de 2022 indican que aproximadamente el 0,2% de la población de este grupo de edad la consumió al menos una vez en el último año, una cifra que se eleva al 0,5% entre las personas de 15 a 34 años. Alrededor de 1.000 personas iniciaron el tratamiento en 2023, lo que supone un aumento de aproximadamente el 9% en comparación con el año anterior.

El informe también señala que la competencia en el mercado de las drogas ilícitas está impulsando la delincuencia relacionada con la cocaína, incluida la violencia y los homicidios relacionados con las bandas.

Además, según el documento, hay indicios de que el aumento constante de la disponibilidad de cocaína en la Unión Europea en los últimos años está repercutiendo en el consumo, como demuestran los residuos de cocaína en las aguas residuales municipales, que han aumentado en más de la mitad de las ciudades. Dado que el intervalo de tiempo estimado entre el primer consumo de cocaína y la primera búsqueda de tratamiento es de unos 13 años, el aumento de la disponibilidad podría traducirse en un aumento de la demanda de tratamiento en los próximos años, advierte la EUDA, que pide una evaluación urgente de la capacidad de respuesta de los Estados miembros de la UE en previsión de este crecimiento potencial.