La medida, visible en nuevas señales, se aplica a toda la longitud de la autopista, generando "consecuencias negativas directas" en los frentes económico, social y turístico, según los alcaldes.

La Mancomunidad Intermunicipal de la Región de Aveiro aclara en un comunicado que argumentó que "la reducción del límite de velocidad sólo tendría sentido en las zonas urbanas, como forma de evitar la instalación de barreras o paneles acústicos".

El ayuntamiento de Aveiro propuso un límite de velocidad de 100 km/h, con señales y radar, en el tramo urbano entre los intercambiadores de Esgueira y Pirâmides, pero según el comunicado, "nunca recibió respuesta."

El Consejo Intermunicipal de la Región de Aveiro, reunido en Ílhavo, decidió rechazar el límite de velocidad, por considerarlo "disparatado".

El órgano de la CIRA decidió pedir urgentemente explicaciones a todas las entidades implicadas y solicitar "medidas inmediatas para restablecer el límite normal" en la autopista.

En el comunicado, el Consejo Intermunicipal señaló que en la A25, "sólo en la Región de Aveiro se siguen cobrando peajes".

En abril, la Comunidad Intermunicipal de la Región de Aveiro (CIRA) aprobó por unanimidad una moción en la que celebraba el compromiso de Luís Montenegro de eliminar los pórticos en la A25.

El actual Primer Ministro, durante la campaña para las elecciones municipales, afirmó que la cuestión de los pórticos de la A25 en Aveiro "no estaba olvidada" y expresó su intención de resolver todos los casos similares en todo el país.