El proceso dejará de utilizar sellos manuales y se registrará íntegramente de forma electrónica.

Según Expresso, este cambio se debe a la integración del país en el Sistema de Entradas y Salidas (SES), la nueva plataforma europea de control de entradas y salidas en el espacio Schengen.

Datos biométricos

Todos los ciudadanos de terceros países deberán facilitar información biométrica la primera vez que entren. El proceso incluye cuatro huellas dactilares y una fotografía facial, que quedarán registradas en el sistema.

El periódico escribe que la recogida de estos datos permitirá crear un historial detallado de los cruces, eliminando los márgenes de error asociados a los sellos manuales.

La publicación añade que el SES calculará automáticamente la duración de la estancia de los viajeros, emitiendo alertas si se supera el límite legal de 90 días sobre 180. Esta funcionalidad ayudará a reducir las estancias irregulares y mejorará la supervisión en todos los Estados miembros.

Bases de datos europeas

El nuevo sistema funcionará en conjunción con plataformas como SIS II, VIS y ETIAS. Este enlace facilitará la identificación de documentos falsos, la gestión de los riesgos de seguridad y el seguimiento de las personas ya marcadas. La interoperabilidad entre bases de datos se considera esencial para una respuesta más rápida y coordinada.

Aplicación gradual en Portugal

Expresso también informa de que la implantación nacional comenzará en los aeropuertos internacionales y, en el transcurso de seis meses, llegará también a los puertos marítimos y a los pasos fronterizos terrestres.

El Sistema de Seguridad Interna, a través de la Unidad de Coordinación de Fronteras y Extranjeros, asegura que la infraestructura está lista para recopilar y verificar datos biométricos, así como para compartir información en tiempo real con otros países.

El proyecto europeo se aprobó inicialmente en 2017, pero sufrió varios retrasos. Estaba previsto que comenzara en 2020, pero se pospuso repetidamente hasta la fecha fijada ahora. Con el calendario confirmado, Portugal se prepara para implantar un modelo de control fronterizo que sustituya definitivamente los sellos manuales por registros digitales.