La inversión directa francesa en Portugal se acelera, con otro peso pesado del otro lado de la frontera comprometiendo capital fresco en el país. Soprema, multinacional fabricante de soluciones de impermeabilización y aislamiento térmico y acústico, ha anunciado un nuevo proyecto de 100 millones de euros en Ribatejo, con el que el grupo duplicará su presencia en la región.

Ya presente en Alpiarça, donde opera una fábrica, Soprema construirá una segunda unidad industrial en la cercana Almeirim. La proximidad entre los dos emplazamientos es considerada por la empresa como una ventaja estratégica, que permite operaciones integradas y eficiencias en la producción y la logística. "Este proyecto tiene como objetivo aumentar la capacidad de producción, apoyar el crecimiento de los mercados internacionales y consolidar la posición de Soprema como referencia en soluciones técnicas para el sector de la construcción", dijo el grupo en un comunicado.

Fundada en Francia y convertida en una empresa global con más de 5.000 millones de euros de ingresos anuales y más de 150 fábricas en todo el mundo, Soprema está posicionando sus operaciones portuguesas como centro neurálgico para el sur de Europa. El movimiento también subraya una tendencia más amplia: Los inversores franceses no han dejado de ampliar su presencia en Portugal, asumiendo importantes compromisos en múltiples sectores. Como se informó recientemente, Francia ha sido una de las fuentes más dinámicas de inversión extranjera directa en el país, desde el comercio minorista y el sector inmobiliario hasta la energía y la industria de alto valor.

La declaración, firmada por Gonçalo Pita Soares, Director General de Soprema Portugal, destaca que la iniciativa forma parte de un programa más amplio de modernización y expansión cuyo núcleo es la sostenibilidad. La empresa enmarca el proyecto como una contribución al desarrollo económico local, haciendo hincapié en "el compromiso con la sostenibilidad y la valorización de la producción local." Se esperan más detalles sobre el calendario y el alcance de la inversión a medida que avancen los trabajos.

Para la región de Ribatejo, la decisión de Soprema no sólo aporta capital, sino también la perspectiva de puestos de trabajo cualificados y un mayor peso industrial. Para Portugal en general, se suma a una narrativa creciente: el país ya no es sólo un destino atractivo para el turismo o el sector inmobiliario, sino una base de fabricación elegida por los actores internacionales por su mano de obra, geografía y estabilidad.

El anuncio de Soprema es más que un hito empresarial. Refleja la profundización de los lazos económicos entre Francia y Portugal, y un voto de confianza en el papel del país como polo industrial competitivo y sostenible en el sur de Europa.