En un comunicado enviado a Lusa, el Comando Territorial de Castelo Branco explica que la situación fue detectada a través de la Unidad de Protección Ambiental, el 24 de junio, a raíz de una denuncia.

Según la información, los militares "constataron que el vertido procedía de una industria agroalimentaria que realizaba el vertido ilegal de efluentes directamente al suelo a través de una balsa de almacenamiento, junto a la línea de agua allí en Ribeira Caia, afluente del río Zêzere, sin ningún tipo de mecanismo que garantizara su depuración".

"A raíz de esta acción, se levantó un acta de infracción administrativa, que fue remitida a la Agência Portuguesa do Ambiente, I.P. / Administração da Região Hidrográfica do Centro, sancionada con una multa que puede ascender a 144.000 euros", añade.

La GNR subraya que está "fuertemente comprometida con la concienciación y el cumplimiento de las disposiciones legales y reglamentarias en materia de conservación y protección de la naturaleza y el medio ambiente".

Además, añaden que cualquier pregunta o queja sobre el medio ambiente debe dirigirse a la línea de atención de SOS Medio Ambiente y Territorio (808 200 520), que está permanentemente de guardia.