Los recursos marinos dan lugar a nuevos productos alimentarios y cosméticos en ValorMar

El balance de ValorMar, que, entre octubre de 2017 y julio de 2021, estudió un uso eficiente de los recursos marinos es "muy positivo", dijo Lusa Marlos Silva, directora del proyecto de Sonae MC. Este proyecto, liderado por Sonae MC, en colaboración con el Centro Interdisciplinar de Investigación Marina y Ambiental de la Universidad de Oporto (CIIMAR) y Fórum Oceano, supuso una inversión de unos ocho millones de euros, cofinanciados por el programa Portugal 2020, y reunió a otras 29 entidades académicas y empresariales portuguesas.

La iniciativa deja nuevos productos y procesos que permiten valorizar los recursos marinos nacionales, promoviendo la sostenibilidad, la descarbonización y la circularidad de la economía. En cuanto a la alimentación, se han desarrollado nuevas conservas, salsas e incluso barritas de cereales que incorporan recursos marinos, pero también envases más sostenibles, explicó el responsable del proyecto: "No son productos totalmente extraños, como los insectos, que causan mucho interés, porque son cosas absolutamente nuevas, pero tampoco son productos comunes. Estamos hablando de sustituir algunos ingredientes que no provienen del mar, por "productos del mar" endógenos, dijo.

Para Marlos Silva, "al adoptar estos nuevos productos, el consumidor y la sociedad ganan una alternativa saludable, una alternativa igualmente sabrosa, pero también una alternativa más sostenible". El "eje más exploratorio" de esta iniciativa exploró las biorrefinerías marinas para "entender otras formas de valorizar estos recursos", habiéndose desarrollado, "a escala de laboratorio, algunos productos cosméticos, algunas cremas, sobre todo de cuidado de la piel".

Una vez desarrollados, estos nuevos productos podrían llegar a las estanterías "muy pronto" si son incorporados por los proveedores. También se produjeron "algunos compuestos para la remediación ambiental", como el uso de algas "para la limpieza de estuarios y corrientes de agua contaminadas". En el ámbito de la iniciativa, también se intentó cambiar los patrones de consumo de pescado, con la creación de un sistema de trazabilidad, que "pretende dotar al sector de información, digitalizar un conjunto de procesos" y proporcionar datos "sobre el origen, la especie, el arte de pesca y el lugar de captura".

Para contribuir a una mejor gestión de las poblaciones de peces silvestres, el proyecto también invirtió en la acuicultura, con la provisión de "tecnologías más eficientes". El director del proyecto de Sonae MC afirma que todavía existe "cierto desconocimiento y algunos prejuicios en los que se cree que el pescado de acuicultura tiene una calidad, en términos de sabor y valor nutricional, inferior a la del pescado salvaje, lo que no es cierto". Con esta apuesta, se espera que, "cada vez más, el consumidor pueda contar con esta producción nacional que con las importaciones". Una vez finalizado el proyecto, ValorMar "entrega un sector mucho más fuerte y una serie de colaboraciones que seguirán produciéndose en otros contextos, en la misma línea de aumentar el valor de los recursos marinos", dijo Marlos Silva.