Según Redes Energéticas Nacionais(REN), la energía eólica suministró el 25% del consumo, la hidroeléctrica el 23%, la fotovoltaica el 7% y la biomasa el 6%.

También hubo un crecimiento interanual del 70 por ciento en la producción hidroeléctrica, dado el año especialmente seco que se produjo en 2022, así como un crecimiento del 43 por ciento en la producción fotovoltaica, debido al progresivo aumento de la capacidad instalada.

La producción no renovable suministró sólo el 19 por ciento del consumo, totalizando 10 TWh, el valor más bajo desde 1988.

"Esto se debe no sólo a la mayor disponibilidad de energía renovable, sino también al elevado saldo importador, que suministró el 20 por ciento del consumo, lo que supone el valor más alto de la historia y su mayor participación en el suministro del consumo desde 1981", señaló la REN.

El consumo de electricidad suministrado desde la red pública en 2023 alcanzó los 50,7 TWh, con un aumento del 0,8 por ciento respecto al año anterior, siendo el mayor consumo desde 2018, quedando en torno al 3 por ciento del máximo histórico registrado en el sistema nacional, en 2010.

En diciembre, el consumo registró un fuerte crecimiento del 6,9 por ciento o del 5,6 por ciento, corrigiendo los efectos de la temperatura y los días laborables, siendo la producción renovable la que suministró el 73 por ciento de este consumo y la no renovable el 11 por ciento, mientras que el 16 por ciento restante correspondió al saldo importador.

En cuanto al gas natural, en 2023 el consumo global fue el más bajo desde 2014, alcanzando los 49 TWh, lo que supone un descenso del 21 por ciento respecto al año anterior, derivado de una reducción del 42 por ciento en el segmento de producción de gas.

El abastecimiento del sistema nacional en 2023 se realizó principalmente desde la terminal de Sines, con un 95 por ciento del total del gas natural que entró en Portugal, y el 5 por ciento restante se recibió a través de la interconexión con España.

El gas descargado en Sines tuvo su origen principalmente en Nigeria y Estados Unidos, que representaron, respectivamente, el 42 por ciento y el 40 por ciento del suministro nacional.

En diciembre, el consumo de gas mantuvo la tendencia a la baja registrada a lo largo del año, con un descenso interanual global del 11,5 por ciento, con una caída del 51 por ciento en el mercado eléctrico, parcialmente compensada por un crecimiento del 10 por ciento en el segmento convencional.