Esta iniciativa cuenta con el apoyo de la mayor asociación de inmigrantes del país, Solidariedade Imigrante, que escuchó las quejas de los inmigrantes de Bangladesh, Nepal, Pakistán e India, aquellos "a los que el Estado portugués no quiere aceptar", según el presidente de la organización.
"Nada cae del cielo, nada se nos da si no luchamos para que las cosas cambien", dijo Timóteo Macedo a Lusa, al comentar la concentración prevista para el 7 de abril a las 10:00.
El dirigente explicó que un grupo de inmigrantes pidió a la asociación realizar una "manifestación de descontento", siendo la del lunes la primera de varias contra la política migratoria portuguesa que tendrán lugar.
"Recientemente nos hemos reunido con representantes de varias comunidades que están siendo duramente perseguidas, incluso por algunas organizaciones de extrema derecha en Portugal. Hablamos de las comunidades asiáticas y también de las islámicas", dijo Timóteo Macedo, denunciando el "aumento de la islamofobia" en el país.
El responsable destacó que la asociación recibe inmigrantes de todo el mundo y ya ha alcanzado los 70.000 miembros, lo que consideró "algo inédito en este país y en Europa" y muestra el descontento de la gente con los cambios legales en Portugal, que eliminaron las manifestaciones de interés, un recurso legal que permitía la legalización de extranjeros sólo con visado de turista.
Timóteo Macedo criticó a la Agencia de Integración, Migración y Asilo(AIMA) por mostrar una "gran ineficacia", que deja en suspenso la vida de miles de inmigrantes, y acusó a esta estructura estatal de "no responder y rechazar más del 50% de las manifestaciones de interés anteriores".
También dijo que los inmigrantes identificados como irregulares en otros países europeos son incluidos en una "lista de no admisión del espacio Schengen" y, por ello, no reciben respuesta de AIMA.
Estas personas optaron por venir a Portugal a solicitar manifestaciones de interés, y correspondería a AIMA identificar los casos y retirarlos de la lista en cuestión si cumplen los requisitos legales en Portugal.
Pero "AIMA no hace absolutamente nada, se queja de no tener recursos humanos y a menudo dice que no tiene competencias para hacerlo", acusó Timóteo Macedo, que quiere, con esta concentración, "alertar a la sociedad civil y a los medios de comunicación sobre la situación de estas miles y miles de personas cuyas vidas están en suspenso".
"Están aquí trabajando, pagan sus impuestos, han estado en otro país y no han hecho nada malo. Pero ahora sus vidas están paralizadas", dijo, destacando que sólo en Oporto hay 800 casos de este tipo.
"Divide y vencerás"
La apertura de vías prioritarias a los ciudadanos de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa, a diferencia de lo que ocurre con otros orígenes, responde a una estrategia de "divide y vencerás" a los inmigrantes y al movimiento asociativo.
Recientemente se firmó un acuerdo entre el Estado y los empresarios para la contratación en los países de origen, llamado "Vía Verde", pero Timóteo Macedo es muy crítico con la medida porque transforma a "los trabajadores en contratistas, esclavizados y encadenados a sus jefes".
"Los patrones no son responsables de nada, porque se lo llevan todo, desde los salarios, el seguro médico, los costes de la educación [en portugués] o la vivienda de la que dijeron al Gobierno que eran responsables", acusó, subrayando que van a "meter a las personas en contenedores, atadas a las empresas, sin derecho a una vida autónoma".






