Portugal es uno de los países europeos que menos éxito tiene a la hora de atraer talento extranjero altamente cualificado. Según datos publicados por Eurostat, en 2023 se concedieron 89.000 permisos de residencia y trabajo a extranjeros cualificados en la Unión Europea (UE), de los cuales solo 26.000 fueron en Portugal. En la vecina España se concedieron 370 autorizaciones de este tipo. Y en Alemania, más de 69.000, según un informe de ECO.
"En 2023, alrededor de 89.000 trabajadores altamente cualificados de origen extracomunitario recibirán una tarjeta azul de la UE, un permiso de trabajo y residencia destinado a personas altamente cualificadas procedentes de países no pertenecientes al bloque comunitario", informa la oficina estadística.
En el otro extremo de la tabla, Chipre ocupa el peor lugar, con cero tarjetas azules de la UE concedidas a talentos altamente cualificados. En la parte baja de la clasificación se encuentran Hungría (17.000 autorizaciones) y Eslovaquia (24.000 autorizaciones).
No muy lejos de estos países se encuentra Portugal, país en el que sólo se concedieron 26.000 tarjetas azules de la UE en 2023.
Hace poco, en la Conferencia Anual del Trabajo, César Araújo, presidente de la Asociación Nacional de Industrias de la Confección y el Vestido(ANIVEC), hizo un llamamiento a la regulación de la inmigración, dejando claro que el país sí necesita trabajadores del extranjero, pero deben ser cualificados. "No queremos profesionales poco cualificados. Queremos profesionales altamente cualificados que nos ayuden en la transformación. Tenemos que regular la inmigración y traer profesionales con valor añadido", subrayó.